La mayoría de los congresos locales en México son opacos, tanto en su conformación como en el uso de recursos públicos, información que tratan y leyes que reforman.
Los 31 congresos y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal las integran mil 142 diputados locales que legislan en promedio siete meses al año, sin obligaciones para dictaminar las iniciativas propuestas y algunos sin páginas de internet que por lo menos le informe a sus ciudadanos quiénes son y por qué ocupan una curul.
Las cámaras locales de Tlaxcala, Chiapas, Baja California Sur y Querétaro ocupan el más bajo desempeño en el estudio "La transparencia legislativa local en México".
En cuando a transparencia en asuntos administrativos, Tlaxcala, Chiapas, Guanajuato y Tamaulipas son los congresos peor calificados.
De nuevo los Congresos de Tlaxcala, Baja California Sur y Chiapas, más el de Yucatán resultan los más opacos en cuanto a trabajo legislativo, es decir, en dar a conocer los asuntos en trámite.
En cuanto a transparencia en conformación y funcionamiento, específicamente en lo que respecta a comisiones legislativas, los legisladores de Querétaro, Chiapas, Baja California Sur, Durango, Guanajuato, Guerrero, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Tlaxcala están por debajo de la media.
Y es que en ningún congreso local existen sanciones a los diputados que no desempeñan adecuadamente su encargo, ni un órgano de gobierno fuerte que permita el correcto desarrollo del trabajo parlamentario a través de los acuerdos entre coordinadores parlamentarios.
A nivel federal, este año entró en vigor en la Cámara de Diputados un reglamento interno que, entre otras cosas, obliga a la dictaminación de iniciativas a fin de terminar con la congeladora, en la que hay miles y miles de propuestas de ley pendientes.
NO AJUSTAN LEYES Los congresos locales debieron ajustar sus leyes para cumplir con las obligaciones en materia de transparencia, pero en promedio, 15 de 32 siguen en la opacidad.
Los congresos con la más baja calificación en materia de transparencia administrativa fueron Tlaxcala, Chiapas, Guanajuato y Tamaulipas. Las legislaturas mejor evaluadas son las del Estado de México, Guanajuato y la Asamblea Legislativa del DF, seguidas, de Tabasco y Veracruz.