La contienda electoral se ha calentado en Torreón pero, literalmente, no hay agua para enfriarla. El problema no es la competencia entre el hermano cómodo Rubén Moreira y el primer compadre Guillermo Anaya, sino la incompetencia de la administración municipal, que se ha colado como tema de campaña en contra del PRI. Nuestros subagentes en varias colonias de la ciudad reportan que los candidatos del tricolor han sido confrontados por los vecinos que se quejan de la falta de agua en esta época de calor. Tan desesperados están, que se van a desahogar con cualquier candidato, quienes, como se sabe, son completamente inútiles para resolver ese o cualquier otro problema. La ausencia del Municipio resulta tan desesperante, que uno de los aspirinos, el priista Antonio Juan Marcos (que ni vela tiene en el entierro), se fue de oficioso a llevar la gestión al Simas, donde al parecer están al tanto del problema, pero piensan que con sólo negarlo va a desaparecer.
El reclamo por la escasez de agua es generalizado y ya empieza a colarse en la campaña, sin que el alcalde Eduardo Olmos lo haya previsto. Hasta ahora don Rubén no ha aplicado un correctivo, pero dicen los subagentes que el candidato dio la orden a don Lalo y huestes que no se aparezcan en actos de campaña, ni siquiera en horarios de trabajo. La razón supuestamente es para evitar críticas sobre la presencia de funcionarios en actos de proselitismo, pero las malas lenguas comentan que otro motivo es que los servicios municipales están tan descuidados que no quieren que los mítines se conviertan en linchamientos. El descontento es generalizado y se extiende a través de sectores socioeconómicos, como quedó demostrado en una reciente comida en la que unas setenta mujeres de la “alta sociedad” se reunieron con la esposa de don Rubén, Carolina Viggiano. Cuentan las subagentas que las asistentes le tupieron con todo al Alcalde. Se dice que los reclamos generalizados fueron el favoritismo que el gobierno estatal ha mostrado a la peronera capital sobre La Laguna, así como duras críticas a don Lalo porque se suponía, según su “slogan”, que iba a rescatar Torreón, pero hasta ahora ven que la ciudad va de mal en peor. Al parecer las damas presentes, esposas de prominentes políticos y empresarios de la localidad, le dijeron a doña Carolina todo lo que sus cónyuges no le han dicho ni al gober Humberto Moreira ni al hermano Rubén. ¿Será porque además de agua falta otra cosa?
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Y hablando de la suspirante a primera dama del Estado, se comenta que doña Carolina anda medio preocupada porque su intención de mantenerse como diputada federal se ha percibido como que le “hace el feo” al tradicional papel de dirigir el DIF estatal. Al parecer la esposa de Rubén Moreira está entre la espada coahuilense y la pared hidalguense, pues su corazoncito todavía late por hacer política en los rumbos de la Huasteca y la Bella Airosa. Para dejar claro cuál sería su papel en Coahuila, doña Carolina ha declarado que desde la Cámara de Diputados hará gestiones para atraer más recursos al Estado, pero el problema con eso es que en su natal Hidalgo ya la traen porque dicen que parece más diputada coahuilense. Ya quedó claro que, de ganar Rubén Moreira la elección, su esposa no seguirá el tradicional rol de las primeras damas en Coahuila, por lo que la incógnita es el rumbo que tomará. En este sentido, nuestros subagentes tienen una fuerte preocupación pues recuerdan que don Rubén ha asistido a varios cursillos de gobierno con el expresidente Vicente Fox y temen que en una de ésas arregle también unas clases con Martha Sahagún. Dios nos tome confesados.
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Nuestros subagentes en el comité nacional del PRI cuentan que el jefazo del tricolor, Humberto Moreira, anda medio molesto con el gober de Durango, Jorge Herrera Caldera. El motivo es un reclamo que don Jorge hizo durante una reciente reunión con los gobernadores y otras figuras de la plana mayor del partido. Se dice que el gober Herrera cuestionó a don Humberto por haberse reunido con José Rosas Aispuro, el exdiputado priista que fue su rival por el gobierno de Durango. La reunión se dio hace unas semanas como parte de una estrategia de don Humberto para regresar al PRI a los “hijos pródigos” que se desperdigaron en el camino del error, para indicar que en las oficinas de Insurgentes Norte se les espera con los brazos abiertos. Obviamente a don Jorge no le cayó nada bien el detalle de que le hicieran guiños a su antiguo rival, pero el reclamo lo hizo enfrente de toda la cúpula del PRI, lo que provocó que a don Humberto se le pusiera malo el cuerpo. ¿Será?
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Por cierto, Humberto Moreira anda totalmente fuera de su elemento ahora que prefirió hacer mutis y limitar sus apariciones públicas para evitar dar declaraciones sobre la detención de su colega priista Jorge Hank Rohn. En un principio, el líder del tricolor reaccionó con furia ante el arresto, acusando una “cacería de brujas” y describiendo a don Jorge como un “extraordinario militante”. Esto iba en sintonía con las advertencias de don Humberto sobre el supuesto “terrorismo político” que preparaba el presidente Felipe Calderón contra figuras del PRI. El problema fue que en una de esas, don Felipe a lo mejor les está cumpliendo. Y es que por más que don Humberto insista sobre la honorabilidad de sus correligionarios, siempre sale alguno que se presta al escándalo y en este caso el empresario y político tijuanense resulta bastante indefendible. Al parecer la instrucción vino de parte del gober del Edomex y suspirante presidencial, Enrique “El Gavioto” Peña Nieto, pues en una de esas le iban a manchar su plumaje. El problema es que don Humberto no aguanta mucho tiempo con la tripa amarrada y en una de esas vuelve a la carga derramando bilis, para entretenimiento del respetable.
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El robo de cobre en Torreón, ha llegado a extremos intolerables, pues no conformes con desquiciar el alumbrado robando el cable, los malandros se han dedicado a saquear estatuas, bustos y placas conmemorativas, de modo que ahora es imposible saber a qué o quiénes honran (honraban) los monumentos de la ciudad, pues nomás quedan los pedestales, y no se roban ésos porque no son de cobre. Lo más inverosímil es que hasta ahora la Fiscalía General del Estado no haya podido dar con una sola banda de robo del metal, ni con las personas que lo compran, cosa que no debe ser muy difícil. Por lo mismo, reportan nuestros subagentes, ya salieron las malas lenguas que dicen que alguien dentro del Municipio quiere hacer negocio cuando las autoridades decidan reponer los monumentos. Y es que con las actuales autoridades aplica muy bien aquello de “piensa mal...”
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La directora municipal de Cultura, Normal González Córdova, envió una corrección a la columna pasada que la identificó como presidenta de la Fundación Colosio del PRI. Doña Norma dejó el puesto hace un año y ahora la fundación es presidida por Sandra López Chavarría. Con el archivo debidamente actualizado, se hace la aclaración, pero persiste la duda sobre qué hicieron doña Sandra y la Fundación Colosio con los más de 350 mil pesillos que pasó el Municipio por concepto de cuotas de funcionarios.