"MUY ENFERMO DE CÁNCER"
Amables lectores lo que a continuación van a leer es una colaboración de nuestro buen amigo el ingeniero Porfirio Isasi de la Garza, espero que sirva de reflexión sobre un problema grave que aqueja a nuestra Región Lagunera.
MUY ENFERMO DE CÁNCER
En un nosocomio del sur de la ciudad llega al estacionamiento del mismo una camioneta nueva, de esas de doble cabina que tienen muchos cromados en el frente y por los lados. Del módulo de recepción la observan con curiosidad cuando de ella desciende un hombre alto y delgado, bien vestido, calzando botas vaqueras de piel de avestruz color miel, pantalón vaquero de gabardina color café, cinto pitiado de Zacatecas con hebilla de acero inoxidable con figuras y letras grabadas en oro, camisa vaquera de manga larga de buena calidad, sombrero blanco resistol de muchas "X" y asomándose por su mano izquierda, por el color y la forma, un Rolex de oro.
Se dirigió al módulo de información y preguntó por el doctor director del hospital, indicándoles, viendo el reloj, que tenía una cita con él a esa hora.
"Sí señor", le respondieron. "Él nos indicó que usted vendría a esa hora y que le dijéramos que lo atendería el subdirector mientras él regresaba porque tuvo una emergencia y se encuentra en este momento en el quirófano.
"Está bien. ¿Dónde encuentro al subdirector?"
"Siga por el pasillo, a tres puertas está el elevador. Suba al tercer piso y en el despacho 302 encontrará su consultorio".
Se anunció con la recepcionista, y ésta le indicó que pasara, abriéndole la puerta.
"Buenos días doctor. Yo tenía cita con su jefe, que es mi amigo, y me convenció de que viniera. Sabe usted, yo no acostumbro ver médicos y casi siempre me curo solo, pero él me dijo que yo tenía un color pálido en la piel como el del Conde de Montecristo y que necesitaba hacerme un chequeo. Mire nada mas".
"Bueno, pues empezaremos por sacarle unas muestras de sangre mientras viene su amigo para ir avanzándole. En un rato más estará aquí el doctor. Dentro de una hora ya tendremos los primeros resultados. No se impaciente. Y mientras eso pasa le haremos algunas pruebas. Principiaré por tomarle la presión arterial. Oiga, pues será por su edad pero usted tiene 140-80 que no es nada malo. Le voy a tomar un electro. Quítese la camisa y la camiseta y arremánguese el pantalón para que la enfermera proceda a ponerle unos electrodos que se pegarán fácilmente".
Después de un rato trajeron un rollo de papel en donde estaba impreso el electro.
"No hay nada relevante en él. Y mire, ya trajeron los primeros resultados del análisis de sangre. Su colesterol anda en 150 y los demás están bien. Acaba de llegar el resultado de los antígenos prostáticos y estoy viendo que le salieron muy altos, a 50.
¿Tiene problemas para orinar?"
"Pues no, pero sí en la noche me levanto unas 3 ó 4 veces al baño".
"Para ese problema generalmente damos medicina y esperamos la reacción, pero por lo alto de los antígenos le sugiero una biopsia de inmediato. Nos acaba de llegar un equipo nuevo, y es muy rápido".
"Pues adelante. Haga lo que sea necesario".
"Pase por aquí. Quítese la ropa y póngase esta batita".
El operador le preguntó que si era nervioso y si quería le pondría anestesia.
"Pues hágalo, doctor. Mientras menos me dé cuenta de lo que me hacen mejor".
El resultado no fue nada halagador, pues de 12 muestras tomadas, 6 salieron malignas.
"Señor, usted tiene problema de cáncer en la próstata, y es necesario hacerle unos estudios más para ver si no se ha extendido a los órganos vecinos y a los huesos".
"Adelante doctor. Yo siempre he donado mucha sangre, porque ha de saber que soy donador de sangre, pero nunca he recibido algo a cambio. Por esta vez ayúdeme, que yo les compensaré con creces.
"Mire señor. Le vamos a sacar unas placas de tórax y el abdomen así como una tomografía y luego le haremos una gammagrafía ósea para estar seguros".
Continuará............
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