Incidencia. Las bajas calificaciones, en gran medida, están vinculadas a problemas de conducta.
La desintegración familiar es un problema social que día con día cobra mayor fuerza, lo que repercute de manera significativa en el rendimiento escolar de los menores. Alumnos de educación secundaria en el estado de Durango son quienes sufren con mayor frecuencia este tipo de situaciones, por lo que los menores presentan conductas destructivas, violentas y poco participativas.
Olga Yolanda Bayona Santillán, secretaria del Comité Ejecutivo de Equidad de Género y Derechos Humanos en del Sindicato Nacional de Trabajadores del Estado, apuntó que sí hay una desintegración familiar, no es posible que a los niños se les eduque y se le forme con la calidad y con todos los valores que requiere un ser humano para su formación, por lo que como maestros lamentan ese tipo de problemática social que persiste en el estado.
En el SNTE se preocupa y ocupa de la situación, ante ello se llevan a cabo constantes pláticas y capacitaciones donde se invita a participar a todos, cada quien desde su espacio, desde su trinchera, para elaborar una serie de propuestas con el fin de mejorar la calidad de educación en el país.
Se lleva a las escuelas, sobre todo del nivel secundaria, conferencias donde más que difundir la problemática del Bulliyng, se busca que los jóvenes aprendan a respetar y exijan ser respetados, por lo que al inculcar en los menores el valor del respeto no tiene por qué generarse violencia en las escuelas; en el último año, se han detectado niños con serios problemas de conducta debido a la desintegración familiar, en el caso se secundarias en promedio se registra un 25 por ciento de afectación.
En el SNTE se lleva un registro de los casos que se presentan, para posteriormente buscar un lugar a donde se puedan canalizar a estos niños, o brindarles un apoyo que de manera coordinada con el sector educativo asista a las escuelas a atender a los niños con serios problemas de conducta.
Tristemente la situación va en aumento y es preocupación de todos, urge observar el entorno y posteriormente implementar acciones para combatir este tipo de problemas sociales. Instituciones gubernamentales en Durango no son las suficientes para la canalización de los menores con problemas de conducta.
En el sistema educativo a nivel estatal no se cuenta con equipos especializados para la atención de niños violentos ni violentados; tampoco con problemas de aprendizaje.
Existe un organismo de sistema federalizado, por lo que los maestros en su nivel general no hay una preparación especial para atender y canalizar situaciones o problemáticas muy especificas de los alumnos; sin embargo, los maestros ponen su mejor es fuerzo y si no existe en un plantel educativo un equipo que oriente, que ayude y resuelva una problemática los maestros se encargan de buscar apoyos tocando puertas.