Derrota. Castigan al primer ministro Silvio Berlusconi y rechazan los referendos de nuevas leyes aprobadas durante su gobierno debido a su baja en la popularidad.
Tras muchos años en el poder del primer ministro Silvio Berlusconi, los votantes italianos le propinaron una nueva derrota al rechazar en referendos varias leyes aprobadas durante su gobierno para reactivar la energía nuclear, privatizar el suministro de agua potable y blindarlo judicialmente.
La votación del fin de semana fue apodada como "la primavera italiana".
Fue la segunda derrota de Berlusconi en otras tantas semanas tras perder las elecciones municipales en Milán y en Nápoles, sin aclarar si renunciará en breve o se aferrará al cargo.
Tras una clara victoria en los referendos, algo inusual en el país, el diario Corriere della Sera concluyó que Italia contempla "el ocaso de una larga temporada". "Si las elecciones locales fueran una bofetada en el rostro, esto es un nocáut para la centro-derecha", agregó. Giacomo Gemelli, que pasea a los turistas en coche de caballos, dijo mientras esperaba clientes en el Panteón romano: "Quizá ha llegado el momento de que se vaya Berlusconi. Existe un movimiento en Italia. Lo veo por la forma en que se comportan los italianos".
Con una asistencia superior al 57%, fue la primera vez desde 1995 que fue obtenido un quórum del 50% para convalidad un referendo.
Los resultados finales dijeron que la mayoría de los que votaron se inclinó por derogar dos leyes para privatizar el suministro del agua potable, abolir una ley que revive la energía nuclear y anular la llamada ley del "impedimento legítimo".
Ap