Sin orden. Todos los votantes querían dar su opinión sin respetar a sus contrincantes, sólo gritos se escuchaban en el ejido Álvaro Obregón. EL SIGLO DE TORREÓN / SANDRA SILVA
Como si fueran elecciones para elegir al representante de un salón de clases de una escuela primaria, se llevaron a cabo las elecciones para jefe de cuartel en 54 de las 55 comunidades de Lerdo.
Los habitantes de las comunidades se reunieron en las plazas principales de sus comunidades para emitir sus votos; según Jaqueline del Río, regidora de Lerdo, las personas levantaban sus manos y se contaban los votos.
En el caso de Álvaro Obregón se armó una trifulca, los votantes no querían que fuera así, aseguraron que de esta manera habría la posibilidad de que hubiera malos manejos en los comicios.
Simpatizantes de ambas planillas se señalaban unos a otros diciendo que sólo las personas que viven en el ejido estaban facultadas para emitir sus votos.
En medio del descontento de la población, la comisión de Gobernación del Cabildo de Lerdo se vio en la obligación de suspender las votaciones en este lugar y esperar a que hoy se reúna la comisión y fijar una nueva fecha.
Desastre
Las votaciones estuvieron desorganizadas.
⇒ No hubo boletas ni urnas.
⇒ No se pedían las credenciales de elector.
⇒ No hubo tiempo para campañas