En la antesala de la frustrada comparecencia de su pleno que había sido citado para ayer en el Senado, en afán, quizá, de atenuar el bombardeo, la Comisión Federal de Telecomunicaciones emitió una resolución a solicitud de Axtel-Avantel, en la que se le fija una tarifa de interconexión a Telcel de 39 centavos por minuto.
Estamos hablando de una reducción del 60 por ciento frente a los 95 centavos que pactó la filial de Teléfonos de México con Movistar, la firma de telefonía celular de la Telefónica México, y de poco menos de la mitad de la que, de acuerdo al convenio, regiría a partir del 2014.
Sin embargo, la baja es de sólo tres centavos en relación con los 42 que la misma instancia le había fijado a la Telefónica México por la conexión de las llamadas de la propia Axtel-Avantel para el periodo 2008-2010.
La caída, pues, es de un centavo por año.
Ahora que, desde otro ángulo, aunque no habló de una tarifa específica para no extralimitar sus facultades, en su frustrado intento de arbitrar en la llamada guerra de gigantes, la Comisión Federal de Competencia subrayó que las tarifas de interconexión que cobran Telcel y su matriz Teléfonos de México son 43.5 por ciento más altas que las del promedio de los países alineados al Organismo para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), al que pertenece México.
El monto al que se alude es de 47 centavos.
En este momento, pues, existen cuatro referencias para ubicar el justo medio para el cálculo de la tarifa de interconexión convertida en manzana de la discordia.
Los 95 centavos avalados por el pacto Telcel-Telefónica; los 42 en perjuicio de ésta; los 39 en perjuicio de Telcel, o los 47 como el hipotético ideal de la instancia en lucha contra los monopolios.
Naturalmente, en la convocatoria a la anarquía ninguna de las firmas, llámense tirios o troyanos, está conforme. De entrada, para Iusacell la resolución de la Cofetel representa una buena noticia, pero es insuficiente la baja, dadas las condiciones del país en términos de inflación y poder adquisitivo de la población.
Y aunque hasta ayer no se había pronunciado frente a la medida, no se necesita tener bola de cristal para predecir que Telcel se inconformará contra la tarifa ante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, y eventualmente ante los propios tribunales. Más allá, la Telefónica México impugnó por la vía jurídica la medida que le obligaría a devolverle a Axtel 300 millones de pesos cobrados en exceso, en un litigio que está aún por resolverse. Ahora que la posición de la CFC provocó que las 25 empresas integradas al llamado Tucotel (Todos unidos contra Telcel), se pronunciaran por tarifas cero.
Intercomunicación gratis para todos. En el merequetengue, se da el caso que si la Telefónica México perdiera el pleito con la Cofetel, es decir si se colocara en firme la exigencia de cobrarle 42 centavos el minuto de interconexión a Axtel-Avantel, el ganador sería Telcel.
Hete aquí que al hacerse retroactiva la medida tomada el año pasado al 2008, la filial de Teléfonos de México estaría en su derecho de exigirle a la filial de la Telefónica de España una devolución por cobro excesivo... ¡de dos mil 500 millones de pesos!
Naturalmente, en reacción a la tarifa que le impone la Cofetel, la Telefónica acudió a la convocatoria de Telcel para fijar un monto de 95 centavos el minuto, a título de referencia para todos.
Y aunque está pendiente aún la resolución de la Suprema Corte frente a un amparo interpuesto por Axtel contra otra resolución de la Comisión Federal de Telecomunicaciones sobre interconexión, que fijaba tarifas del 2006 al 2007, y la promesa de la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado de meter la mano ante la inacción de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Cofetel, es evidente la falta de gobierno para plantear una solución salomónica.
Estamos hablando de sentar a las partes para obligarlas a un acuerdo antes de que se derrame más la sangre y las heridas se enconen.
Por lo pronto, el primer diferendo entre Telcel y Axtel estuvo dos años frenado en la mesa de la Cofetel, con la novedad de que al solicitar la segunda un marco para la tarifa del 2008 al 2011 la instancia dejó pasar los meses, provocando que el asunto se elevara a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, bajo la presión de la "alternativa ficta", es decir si no hay una resolución en un plazo específico se da por aceptada la inconformidad.
La dependencia tampoco tuvo respuesta en tiempo y forma.
¿Y dónde está el piloto?
BALANCE GENERAL
A solicitud del senador perredista Graco Ramírez, la Comisión de Energía está citando a comparecer al director general de Petróleos Mexicanos, Juan José Suárez Coppel, para explicar los bandazos de la paraestatal en un añejo pleito con Mexicana de Lubricantes, de la que es socio minoritario.
La paraestatal le está jugando al borrón y cuenta nueva en una relación de 18 años que le ha dejado pérdidas multimillonarias en un escenario de ausencia total de transparencia.
De facturar 225 millones de dólares a su privatización, la firma cuyo socio mayoritario es la Impulsora Jalisciense, registró pérdidas al segundo año de operación.
Y de ahí hasta acumular, según el Senado, tres mil 300 millones de dólares.
Lo inaudito del caso es que Pemex le dio todo, desde la exclusividad para vender aceites y lubricantes en su red de gasolineras, hasta la facultad de pagar la contraprestación en abonos chiquitos... que nunca se completaron.
Pemex está a punto de acudir a una asamblea de socios, tras 11 años de sequía, en la que avalaría un escenario de reconciliación.
ACERERAS EN LUCHA
A solicitud de las firmas acereras instaladas en el país, el diputado priista Melchor Sánchez, presentó un punto de acuerdo para exigirle a la Secretaría de Economía frenar la reducción de aranceles o impuestos de ingreso a las importaciones de acero.
De acuerdo a la Cámara del ramo, la medida está causando estragos en el sector ante la catarata que llega de China, Rusia y la India, países que ofrecen una gama de subsidios a la producción para los mercados internacionales. Del otro lado de la moneda, nuestras industrias enfrentan altos precios de energéticos, que representan entre el 25 y el 30 por ciento de sus costos de producción, además de crédito caro y escaso, y ausencia de infraestructura que facilite la distribución del producto, en paralelo a la inseguridad de las carreteras.
De acuerdo a la "estrategia" de la dependencia encabezada por Bruno Ferrari, en los próximos cinco años ningún producto importado de países con los que no hay acuerdos de libre comercio tendrá un arancel mayor de 20 por ciento.
De hecho, el promedio caerá de 10 a cinco por ciento.
Y háganle como quieran.
ICA CON TODO
De regreso como multinacional mexicana, la constructora ICA de Bernardo Quintana Isaac va a pelear este año contratos por 33 mil millones de pesos, lo mismo a nivel local que en Colombia y Panamá.
El abanico alcanza carreteras, puertos, plataformas y refinerías, con énfasis en la que se planea en Tula, Hidalgo.
En el plano inmediato la pelea está en la licitación por el paquete carretero Farac-Michoacán; la concesión de la autopista Salamanca-León, y el acueducto Falcón en Matamoros.
