Signori y otras 44 personas están siendo investigada por su presunta implicación en una supuesta trama de fraude en las apuestas futbolísticas en Italia. EFE
El ex futbolista de la Primera División italiana, Giuseppe "Beppe" Signori negó hoy entre lágrimas haber participado en una red de apuestas ilegales, desmantelada el pasado primero de junio por la policía, que lo arrestó junto a otras 15 personas.
"Yo no hago apuestas ilegales, ni las quiero hacer", declaró el ex jugador en una rueda de prensa, a la que citó en la ciudad de Bolonia (centro-norte), para aclarar su papel en el último escándalo del balompié italiano.
Insistió que solamente le gusta hacer apuestas legales y sin poder contener el llanto, aseguró que no forma parte de ninguna asociación delictiva.
Acusó a la prensa y la magistratura de haberlo "masacrado", al acusarlo de ser el principal miembro de una red delictiva que habría falseado decenas de partidos de la Primera y Segunda División del futbol italiano, para condicionar los resultados a su favor y ganar apuestas millonarias.
"He sufrido una masacre mediática, creada por noticias falsas e inventadas", dijo Signori, a quien apenas el pasado 14 de junio le fue revocado el arresto domiciliario.
Resaltó que en la ordenanza de los jueces que desbarataron la red ilegal, hay 50 mil interceptaciones telefónicas, "pero en ninguna aparece mi teléfono".
"Terminé dentro esta historia por una tarde equivocada, con personas equivocadas", aseguró, en relación a una reunión que mantuvo con dos contadores acusados de formar parte de la asociación delictiva.
Signori, que aún es indagado, fue el principal arrestado el pasado primero de junio, cuando la policía capturó a 16 personas en una redada contra las apuestas ilegales.
Los detenidos fueron acusados de asociación delictiva finalizada al fraude en competencias deportivas.
De acuerdo con la prensa local, los imputados suministraban calmantes a los jugadores, para poder inhibir su desempeño en el campo de juego y evitar que sus escuadras ganaran.
