A golpes matan a empresario

En el interior de su fábrica del Parque Industrial Lagunero (PIL) de Gómez Palacio, un empresario fue asesinado con un objeto contundente entre la noche del sábado y la madrugada del domingo y su cuerpo descubierto hasta ayer domingo por la mañana. Se maneja como móvil el robo, ya que se llevaron dinero en efectivo y un vehículo.

El reporte

Al filo de las 11:15 horas se recibió el aviso sobre una persona que al parecer estaba muerta en el interior de la empresa Sociedad de Mercados Afiliados, S. A. de C. V.", con domicilio en calle Guanacevía número 439, entre Piedras Negras y Acatita de Baján.

Acuden socorristas

Los primeros en llegar fueron los paramédicos de la Cruz Roja y al revisar los signos vitales del hombre, se percataron que había muerto, por lo cual dieron parte a la Vicefiscalía de la Región Laguna Durango.

Poco después arribaron a la citada empresa, dedicada a la fabricación de maquinaria agrícola, el agente investigador del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Integridad Corporal, así como peritos de la Fiscalía y elementos del Ejército Mexicano.

Escena del crimen

Las autoridades encontraron en una cama, atado de las manos, a quien en vida llevara el nombre de Ricardo Frisbie Carpic, de 76 años, identificado por su hijo, César Frisbie.

El occiso presentaba a simple vista huellas de golpes en la cabeza y otras partes del cuerpo, producidas por un objeto contundente y estaba atado con las manos hacia delante con cinta adhesiva y una corbata. Se encontraba sobre una cama.

Ahí se quedaba

De acuerdo a lo manifestado por su hijo, quien lo descubrió cuando llegó pasadas las diez de la mañana que acudió a la fábrica, su papá tenía tiempo de vivir en su misma empresa, para lo cual habían habilitado un cuarto que le servía como recámara.

Los asesinos se llevaron una camioneta Ram, color verde, modelo 1999, dos computadoras y siete mil pesos, según lo manifestado por el hijo de la víctima.

Investigan

Trascendió que desde ayer mismo comenzaron los trabajos de los agentes del grupo de Homicidios de la DEI y se dijo que la puerta de la entrada principal no estaba violentada, por lo que podría haberse tratado de personas que conocían a su víctima.