Pacientes. Doña Ruperta y Don Manuel (quien se encuentra en silla de ruedas) quieren hacerse responsables del joven que quedó huérfano. Son sus abuelos.
Familiares de 8 de las 16 víctimas del ejido Petronilas que fallecieron en un accidente en la carretera libre a Saltillo el sábado pasado, acudieron ayer a la Presidencia Municipal.
Y es que el joven José Luis Adriano Escareño, de 17 años de edad, quedó huérfano y al todavía ser menor de edad, requiere quedar bajo la custodia de algún familiar.
En este caso, sus abuelos, doña Ruperta y Don Manuel Adriano, quienes perdieron a sus hijos en el accidente quieren hacerse responsables del menor.
Juana Adriano López, tía del joven huérfano expuso que el Ayuntamiento les ha estado proporcionando asesoría legal para definir la situación del joven.
Como se recordará, anteriormente el alcalde de Matamoros, Guillermo del Real Castañeda, ofreció la asesoría legal necesaria a los deudos de las víctimas del accidente del sábado.
La autoridad expuso que es importante para el Ayuntamiento ayudar a definir la situación legal de los tres huérfanos menores de edad, de los que hasta ahora tienen conocimiento y determinar quién o quiénes se convertirán en sus tutores, lo que garantizará que se encuentren al cuidado y bajo la responsabilidad de algún familiar que velará por su bienestar.
Las 16 personas que fallecieron pertenecen a las familias Adriano López, Landeros Jiménez, Valero Rodríguez, Escareño Recio y Montoya Álvarez, del ejido Petronilas, del municipio de Matamoros.
Adicionalmente estas familias podrán nombrar a sus representantes legales para que puedan obtener alguna indemnización.
La licenciada Guadalupe Ibarra, del Departamento Jurídico de la Presidencia Municipal tiene instrucciones del alcalde de atender a estas personas para que en ningún momento sean vulnerados en sus derechos. A la fecha todavía no se ha podido iniciar con las indemnizaciones por parte de la empresa propietaria del tráiler que se impactó con la camioneta donde viajaban las 16 víctimas del ejido Petronilas, cuando se dirigían a Congregación Hidalgo.
