Los ministros de Interior de la Unión Europea (UE) han decidido hoy endurecer la normativa comunitaria de exportación, importación y concesión de licencias de armas para evitar el tráfico ilegal de las mismas dentro del bloque europeo.
El comercio ilegal de armas nutre a la criminalidad organizada transfronteriza y genera, según los datos de la Comisión Europea, cerca de 180 millones de euros al año.
La nueva normativa permite además seguir el rastro de las armas vendidas legalmente de forma que no se pierda la pista cuando pasen al mercado negro.
La legislación excluye a las armas más pequeñas, las de recreo y exhibición, que por contra ahora podrán importarse y exportarse en la UE con menos obstáculos administrativos.
Las exportaciones de armas estarán sujetas a autorizaciones que contendrán toda la información necesaria para seguirles la pista y los países que reciban las armas importadas deberán tomar nota por escrito de la recepción y dar su visto bueno.
Las autoridades tendrán la obligación de negar una licencia de exportación si la persona que la solicita tiene algún antecedente de tráfico ilegal.
"El tráfico de armas es una amenaza a la seguridad y un negocio lucrativo para el crimen organizado", ha destacado la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom, que ha valorado la decisión de los ministros.
Después de que el Parlamento Europeo diera ya su visto bueno al texto, solo faltaba la luz verde la UE para hacer realidad esta nueva normativa.
La Comisión Europea propuso endurecer la normativa hace ya diez años, en 2002.