El nuevo rescate que la zona del euro tiene previsto aprobar hoy para Grecia será una inmensa ayuda para el país al borde de la bancarrota, pero sus problemas a largo plazo seguirán sin resolverse, afirmó hoy un experto en políticas europeas.
Claro que el rescate no solucionará el problema de Grecia, pero será una inmensa ayuda para los próximos meses, no semanas, aseguró el director ejecutivo del Centro para Estudios de Política Europea (Centre for European Policy Studies), Karel Lanoo.
En entrevista con Notimex el analista se preguntó cuánto tiempo, para responderse de inmediato: Dependerá mucho de si el gobierno aplica las medidas de austeridad y con qué velocidad.
La segunda ayuda europea a Grecia, cuyo valor está estimada en 130 mil millones de euros, permitirá al país pagar deudas por 14 mil 500 millones de euros que vencen el 20 de marzo y, con ello, evitar una moratoria.
El analista se refirió al plan de ajustes que incluye la disminución del salario mínimo en 22 por ciento y el despido de 15 mil burócratas que le fue impuesto a Atenas por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional a cambio de la nueva ayuda financiera.
A su juicio, la rebaja en los salarios puede tornar el país más atractivo para la empresas, que optarían por instalarse allí, lo que podría contribuir al relanzar la economía helena.
Pero, dijo, la evolución de la situación dependerá también de cómo el sector privado responda al paquete, que incluye la condonación de 70 por ciento del valor de los títulos griegos en manos de los bancos, por un total de 100 mil millones de euros.
Lanoo fue categórico al afirmar que Grecia no tiene otra alternativa que aceptar la ayuda internacional y doblarse a las exigencias de sus acreedores.
De no hacerlo, tendría que enfrentar la bancarrota y eso sería mucho peor, sería un desastre para el país, enfatizó.