El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, advirtió sobre una “catastrófica guerra civil” en Siria, por lo que urgió al régimen sirio a cumplir el plan de paz del emisario Kofi Annan.
Indicó que la matanza de 108 personas en Houla, la cual provocó el horror y la indignación mundial, sumió a Siria en un punto sin retorno.
“Masacres como las vistas el pasado fin de semana podrían hundir a Siria en una catastrófica guerra civil, una guerra civil de la cual el país nunca se recuperaría”, dijo Ban durante un foro de la Alianza de las Civilizaciones en Estambul, Turquía.
El jefe de la ONU exigió al régimen sirio honor a su compromiso con el plan de paz y cumplir con sus responsabilidades con su pueblo.
Expresó su preocupación sobre la posibilidad de que se haya llegado a un punto de inflexión en Siria, sin embargo rechazó hablar de un choque de civilizaciones entre Oriente y Occidente sobre Siria.
Ban aseguró que es posible caminar hacia una solución política en Siria, por lo que exhortó, una vez más, al presidente Bashar al-Assad a poner fin a la violencia contra su propio pueblo, reportó la agencia turca de noticias Anatolia.
“Podemos avanzar para encontrar una solución política en Siria”, declaró Ban en su discurso inaugural del foro de la Alianza de las Civilizaciones, en el que destacó el papel de la organización mundial en la prevención y resolución de conflictos.
“No somos observadores pasivos: nuestro enviado especial para Siria, Kofi Annan, ha expuesto lo que sucede allí”, recordó Ban Ki-moon, al tiempo que reiteró su condena a la masacre de 108 personas, incluidos 49 niños, en Houla.
La masacre provocó una ola de indignación mundial, llevando a numerosos países, entre ellos Estados Unidos, Reino Unido, Francia, España y Australia a expulsar a los diplomáticos sirios en sus respectivas capitales, para aumentar la presión sobre el régimen sirio.
