Plan de seguridad. La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton (c), llega a la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para hablar sobre la violencia en Siria.
Rusia advirtió que la aprobación del proyecto de resolución sobre Siria, que será discutido en el Consejo de Seguridad, conducirá a 'la guerra civil' en ese país y rechazó persuadir al presidente Bashar al Assad a dejar el poder.
'El proyecto de resolución sobre Siria presentado ante el Consejo de Seguridad no conducirá a la búsqueda de un compromiso, sino a la guerra civil', dijo el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Gennady Gatilov, citado por la agencia de noticias Interfax.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reuniría ayer para estudiar la resolución propuesta por la Liga Árabe y por las principales potencias occidentales para poner fin a la violencia en Siria, que ha dejado más de cinco mil muertos desde marzo pasado.
El proyecto, impulsado por Reino Unido y Francia y respaldado por la Liga Árabe, reclama a Assad ceder el poder a su vicepresidente en un plazo de 15 días para que forme un gobierno de unidad nacional que gestionará el país hasta la celebración de elecciones.
El borrador de la resolución también exhorta a poner fin a todas las violaciones de derechos humanos y los ataques contra la gente que hace uso de su derecho a la libertad de expresión, así como garantizar la libertad de manifestaciones pacíficas.
Además, liberar a todos los presos arrestados durante las protestas antigubernamentales, retirar las tropas de todas las localidades y asegurar la vuelta a casa de todos los refugiados.
Rusia, tradicional aliado de Siria y el principal abastecedor de armamento, reiteró su oposición al texto que considera 'inaceptable' y aboga por negociaciones informales entre el régimen sirio y la oposición en territorio ruso.
Gatilov destacó que sólo respaldará una resolución que condene la violencia en Siria, llame a las dos partes al diálogo y excluya la injerencia en cuestiones internas y la amenaza de sanciones contra Damasco.
Poco antes, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, reiteró que su país de ninguna manera intentará persuadir al presidente sirio para que abandone el poder. 'La política de Rusia no consiste en pedirle a nadie que dimita.
El cambio de regímenes no forma parte de nuestro oficio', declaró Lavrov en una entrevista con la cadena de televisión australiana ABC, en el marco de su visita a aquel país.
Duelo y cólera por masacre en Siria
La oposición siria mantiene una jornada de duelo y cólera por la muerte de cientos de personas durante la represión de los últimos días, mientras las fuerzas del régimen sirio reforzaron sus posiciones a las afueras de Damasco. Ante 'las salvajes masacres de civiles', el opositor Consejo Nacional Sirio (CNS) coordinó su acción con los militantes que lideran la sublevación para llevar a cabo 'una jornada de duelo y de cólera' en el país.
A través de un comunicado, divulgado por medios árabes, el CNS pidió a 'las mezquitas a anunciar los llamados a la plegaria y a las iglesias a hacer repicar las campanas', en señal de duelo por la muerte de cientos de civiles inocentes.
