El Acuerdo Estratégico TransPacífico de Asociación Económica (TPP) es señalado por organizaciones civiles como un intento más por regular el ciberespacio con medidas similares a las propuestas en el ACTA y las iniciativas estadounidenses -ahora congeladas- SOPA y PIPA.
Algunos de los puntos polémicos, que señalan organizaciones como la Fundación Frontera Electrónica sobre documento filtrado de este acuerdo, son el incremento en los años de protección a los derechos de autor; capacidad para solicitar el IP de cualquier usuario; mayores castigos a la violación de propiedad intelectual, y adoptar y reforzar las medidas contenidas en la ley estadounidense que protege el copyright (DMCA)
Sin embargo, a diferencia de ACTA, el TPP es un poco más complejo, ya que no sólo refuerza las medidas de protección a la propiedad intelectual, sino que es un acuerdo que impulsa las relaciones económicas de la región Asia-Pacífico
México podría unirse a este acuerdo que beneficiaría los tratados comerciales y mantendría un sistema de comercio abierto, según informó el secretario de Economía, Bruno Ferrari, durante una gira de trabajo en Washington D.C.
El Gobierno federal mostró su interés por unirse a las negociaciones del TPP en noviembre de 2011, meses antes de la declaración del secretario Ferrari, durante la Reunión Conjunta de Ministros de Comercios del Foro de Cooperación Economía Asia-Pacífico (APEC, la cual preside EU), celebrada en Honolulu, Hawai.
Brunei Darussalam, Chile, Nueva Zelandia y Singapur firmaron en 2005 el TPP, también conocido como P4, que dejaron abierto para que otros países se sumaran.