Gira diplomática. Con su visita a Quito el presidente de Irán se despide de América Latina.
El presidente iraní Mahmud Ahmadinejad llegó a esta capital en la última parada de una gira por la región que incluyó a Venezuela, Nicaragua y Cuba, en medio de tensiones de ese país con Estados Unidos y otros países de Occidente por su programa nuclear. Ahmadinejad llegó a Quito para reunirse con su colega Rafael Correa. El palacio de gobierno lucía en uno de sus patios una gigantesca bandera de Irán.
La gira se produce en medio de la expectativa debido a las presiones que enfrenta Teherán por el endurecimiento del bloqueo de Occidente a la producción petrolera iraní a causa de su programa nuclear y las recientes tensiones que han surgido entre EU e Irán por el paso por el Estrecho de Ormuz.
El presidente Rafael Correa dijo que Ecuador "no permitirá que nos dicten de afuera qué hacer" en materia de política exterior tras las advertencias de la vocera del Departamento de Estado, Victoria Nuland, quien señaló que EU ha "sido absolutamente claro con países en todo el mundo de que ahora no es un buen tiempo para profundizar relaciones ni de seguridad, ni económicas, con Irán". En tanto el canciller Ricardo Patiño señaló el mismo día que "nuestro país no acepta presiones y desarrollará las relaciones comerciales, políticas, diplomáticas ... de todo tipo con los países que considere que le interese a nuestro país".
Esta es la segunda visita del mandatario iraní a Ecuador. La primera fue con motivo de la posesión del presidente Correa, en enero de 2007. El mandatario ecuatoriano devolvió la visita en 2008, cuando ofreció vender a Irán cacao, banano, camarón y madera y mostró interés en la industria petroquímica, automotriz y en plantas ensambladoras de tractores agrícolas.