Estudiantes del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITSEM) volverán a las calles en la capital del estado en demanda de una respuesta en torno a la forma en la que el Ejército mató a dos de sus becarios de posgrado la madrugada del 19 de marzo del 2010.
A casi dos años de la extraña muerte de los estudiantes Jorge Antonio Mercado Alonso, de la maestría en Ciencias, y de Javier Francisco Verdugo, del doctorado en Ciencias, ahora sus compañeros del Tecnológico saldrán este 15 de marzo a las calles en punto de las 14:00 horas.
Con la difusión de un video, compañeros de los becarios muertos narran en primera persona los sucesos de la madrugada del fatídico 19 de marzo del 2010.
"Mi nombre es Jorge Antonio Mercado Alonso, soy estudiante del Tec de la maestría en Ciencias. Yo me llamo Javier Francisco Verdugo, estoy estudiando el doctorado en Ciencias, aquí también en el Tec. En la madrugada del 19 del marzo del 2010 Javier y yo estábamos trabajando hasta tarde aquí en el campus, salimos por la puerta de Luis Elizondo y Garza por ahí de la una de la mañana, minutos después nos agarró una balacera entre sicarios y militares".
"Cuando todo acabó los militares movieron nuestros cuerpos y a los dos nos sembraron armas. Nos quisieron hacer pasar por sicarios.
"Hemos guardado silencio desde hace mucho tiempo, en esa puerta hace dos años, estábamos todos, yo también soy Jorge, yo también soy Javier", manifiestan los jóvenes con un rostro con pocas gesticulaciones, sin mucho movimiento.
Pero las redes sociales también son utilizadas por los estudiantes quienes difunden a través de @AsambleaTec en Twitter y de Asamblea Estudiantil Tec en Facebook; la hora y lugar de reunión para iniciar la manifestación.
El guión basado en la recomendación No. 45/2010 hecha por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, destaca que tras recibir seis y siete impactos cada uno a corta distancia, al caer agonizantes fueron golpeados en el rostro con un objeto liso y plano.
Aunque se informó de la detención de militares responsables de los hechos, nunca se reveló su identidad ni el castigo al que se hicieron acreedores. Por lo que el video estudiantil, "Yo también soy Jorge; yo también soy Javier" busca crear conciencia entre la Procuraduría General de la República (PGR), la Procuraduría de Justicia Militar y la procuraduría estatal, que "cerraron el caso por incompetencia".