'Andar en la obra es como un deporte'

José Gerardo Rodríguez Acevedo tiene 54 años de edad y 27 los ha dedicado a trabajar como albañil.

"Sí me gusta el trabajo éste, de la obra, es como un deporte que anda uno haciendo, es pesado, pero es como un deporte, se distrae uno", dijo.

Originario de Torreón, inició en este oficio cuando perdió su empleo como chofer en el Municipio y no encontró más oportunidades de trabajo, además de que tenía que sacar a su familia adelante.

"El primer lugar donde trabajé fue en El Campestre, una casa", comentó, a partir de esto siguieron otras construcciones y ayer celebró el Día de la Santa Cruz en una obra que se realiza junto a la clínica 71 del IMSS, donde el ambiente entre los trabajadores es de camaradería. El patrón les llevó una rockola, mesas, sillas, comida, un padre para bendecir y se les permitió laborar sólo mediodía.

"El Día de la Santa Cruz tengo entendido que es para convivir un rato los trabajadores, los patrones, pasarla bien sin pleitos y sin nada, una comida, convivir bien", expresó.

"Nos convidamos unos a otros, hay mucha armonía aquí", comentó.

Son muchos los riesgos que envuelven el oficio de José, por el peligro mismo de subir a andamios, los clavos, la muerte ha estado cerca de su trabajo, pero sí en su hogar, donde fallecieron su esposa y uno de sus hijos.

Hasta el momento, no le ha tocado saber de ningún accidente, ni de sus compañeros. El temor de José es el cáncer de piel, pues trabajan de 8:00 a 18:00 horas bajo el sol, por lo que utiliza camisa de manga larga, sombrero y lentes.

Actualmente, el señor tiene un hijo adulto, que no puede dedicarse a la obra porque tuvo un accidente y tiene placas en distintas partes del cuerpo, por lo que lava automóviles.

José consideró que es posible vivir de la albañilería si hay una buena administración del dinero, pues algunas constructoras pagan bien y otras no, además de que es algo eventual.

"A veces se acaba el jale y lo despiden a uno, entonces hay que buscar, tarda uno una semana, un mes, dos meses, pero vuelve uno a acomodarse, así es el trabajo", comentó.