Nexos. La medida tiene como objetivo que la PGR perfeccione la investigación en su contra por presuntos nexos con el narcotráfico.
Un juez federal decretó el arraigo por 30 días en contra de los presuntos implicados en el secuestro y homicidio de José Eduardo Moreira, el hijo del exgobernador de Coahuila, Humberto Moreira, quien fue asesinado el 3 de octubre pasado en Ciudad Acuña. La medida tiene como objetivo que la Procuraduría General de la República (PGR) perfeccione la investigación en su contra por sus presuntos nexos con el narcotráfico.
La dependencia informó que un juez especializado concedió la medida cautelar en contra de los policías municipales de Ciudad Acuña, Víctor Landeros Cifuentes, alias "La Iguana" y Jorge Tenorio Takajasi, "El Taka", así como contra Clemente Bárcenas Cepeda, quien facilitó una casa a los uniformados para ocultarse, después de que se perpetró el homicidio.
Estos sujetos fueron detenidos por elementos de la Policía Federal y fueron presentados el lunes pasado ante los medios de comunicación.
Landeros Cifuentes era el supervisor de la Policía municipal de Acuña, quien presuntamente brindaba protección al cártel de "Los Zetas". El día del homicidio de Moreira, mantuvo comunicación con su jefe, el director operativo de la corporación Rodolfo Castillo Montes -también bajo arraigo-, para pactar un encuentro en una tienda de conveniencia.
Cuando la víctima llegó a la cita, los policías municipales implicados lo entregaron al narcotraficante Carlos Arnulfo Flores, "El Flaco", presunto jefe de plaza de "Los Zetas" y a su lugarteniente, Rubén Sifuentes Cadena, "El Shaggy".
Supuestamente los detenidos confesaron así su participación en los hechos. El policía Tenorio Takajasi aceptó haber acompañado a "La Iguana" para entregar a José Eduardo Moreira a sus homicidas.