Faraj al-Deirsy, el jefe de la policía de Bengasi, la conflictiva ciudad libia donde fue asesinado el embajador estadounidense, Christopher Stevens, en septiembre pasado, murió tras ser víctima de un atentado.
En el último episodio de violencia en la segunda ciudad en importancia en Libia, Faraj al-Deirsy murió de múltiples heridas de bala, señalaron este miércoles fuentes de la policía y del Ministerio del Interior.
"El ataque pasó frente a su casa la noche del martes cuando hombres armados desconocidos abrieron fuego contra el jefe de la policía y después huyeron", dijo una fuente de seguridad.
Un funcionario del Ministerio del Interior confirmó que Deirsy, a cargo de la seguridad en Bengasi, fue asesinado, reportó el canal qatarí de noticias Al Yazera.
Libia se ha visto afectada por la inestabilidad persistente desde el derrocamiento del líder Muamar Gadafi el año pasado, luego que organizaciones armadas continúan asolando ese país africano.
Las autoridades todavía están tratando de desarmar a numerosos grupos, en su mayoría milicianos que participaron en el levantamiento, que se niegan a deponer las armas.
El incidente se produce cuando grupos locales en Bengasi también han realizado protestas exigiendo más poder para la zona este de Libia, frente a lo que consideran negligencia de las autoridades centrales de la región.
En septiembre, el embajador Stevens fue asesinado junto a otros tres estadunidenses en un ataque contra el consulado de Estados Unidos en Bengasi, la cuna de la revuelta de Libia, que se inició en febrero de 2011.