La Secretaría de Marina asestó uno de los golpes más importantes contra Los Zetas, al detener en San Luis Potosí a Iván Velázquez Caballero, "El Talibán", tercero en el mando del cártel y quien había declarado la guerra a los líderes Heriberto Lazcano, "El Lazca", y Miguel Treviño, "El L-40".
"El Talibán" o "Z-50" es señalado como uno de los responsables de la ola de violencia que aqueja a San Luis Potosí, donde en los dos últimos meses se han registrado al menos 81 asesinatos, a partir del hallazgo de 14 cuerpos en una camioneta abandonada en la carretera a Zacatecas.
De acuerdo con fuentes oficiales, la detención ocurrió horas después que en Parás, Nuevo León, infantes de la Armada detuvieran a 18 integrantes de la banda delictiva; entre ellos, una menor de edad.
La detención de Velázquez ocurrió ayer alrededor de las 18:30 horas en una vivienda de la calle Juan Cárdenas, del Fraccionamiento Tangamanga, una zona residencial de la capital potosina, donde personal naval también aseguró a tres personas.
El líder criminal estaba incluido en la lista de los criminales más buscados por el Gobierno federal y la PGR ofrecía una recompensa de 30 millones de pesos a quien aportara información que llevara a su captura.
Hasta hace unos meses, "Z-50" era uno de los hombres de confianza de Lazcano, el número uno de ese cartel, y estaba a cargo de la plaza de Zacatecas y San Luis Potosí desde 2011, aunque también tenía influencia en Coahuila, principalmente en la zona de La Laguna.
En 2005 fue ubicado como uno de los jefes de plaza en Nuevo Laredo, gracias a que participó dos años antes en la cruenta defensa que hicieron Los Zetas de ese territorio, cuando los quiso invadir el Cártel de Sinaloa y del Milenio.
El FBI de hecho sostenía que "El Talibán" y Omar Lorméndez Pitalúa, "Comandante Pita", también encargado de esa plaza, residían en Laredo, Texas.