La Casa Blanca desestimó hoy que el ataque que costó la vida al embajador estadunidense en Libia, Chris Stevens, haya sido planificado e insistió que las causas del incidente se deben a protestas por un video que ofende al islam.
“Hemos dado información sobre lo que creemos fue la causa que precipitó la protesta y la violencia, con base en la información que disponemos”, dijo el vocero presidencial Jay Carney.
Indicó que la investigación que conduce la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) continúa “y esa investigación seguirá los hechos a donde sea que conduzcan”.
En su habitual rueda de prensa, Carney mantuvo reservas frente a reportes que sugieren que el ataque contra el consulado de Estados Unidos en la ciudad libia de Bengasi habría sido premeditado, al asegurar que la investigación en curso no ha concluido.
Destacó lo que “la embajadora (de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Susan) Rice y otros han dicho de lo que sabemos hasta ahora del video y su influencia en las protestas que ocurrieron en El Cairo, en Bengasi y en otras partes”.
El video titulado “La inocencia de los musulmanes” que muestra una denigrante imagen del profeta Mahoma y del que se ha difundido una porción de 14 minutos a través de la red YouTube, ha generado violentas protestas en varios países musulmanes.
El embajador estadunidense en Libia, Chris Stevens, y tres funcionarios diplomáticos más perdieron la vida durante un violento ataque armado la semana pasada, en medio de las violentas protestas ocurridas en la ciudad de Bengasi.
Más allá de las especulaciones sobre un posible ataque premeditado y no espontáneo, Carney dijo que la realidad es que Libia es un país inestable y con serios riesgos.
“Libia es un lugar volátil que ha pasado por una revolución y una guerra donde hay una abundancia de armas, incluyendo artillería, y hay ciertos grupos que tienen esas armas y que buscan aprovechar las circunstancias como en cualquier parte”, aseveró.