Informe. El director de Amnistía Internacional México, Alberto Herrera Aragón en la presentación del informe 'Culpables conocidos, víctimas ignoradas, Tortura y Maltrato en México'. (EFE)
La organización Amnistía Internacional (AI) informó que de acuerdo con los últimos reportes de la CNDH durante los últimos cinco años se mantuvieron prácticas de tortura en México, pese a que las autoridades han adoptado algunas medidas para reducirlas.
Al presentar el informe "Culpables conocidos, víctimas ignoradas, Tortura y Maltrato en México", el director ejecutivo de AI en México, Alberto Herrera Aragón, lamentó que a pesar que se denuncian los hechos "los culpables gozan de impunidad".
Citó que organismos nacionales e internacionales de derechos humanos han recomendado a las autoridades mexicanas para asegurarse que todos los responsables de tortura, por acción u omisión, rindan cuentas, pero las cifras de impunidad reflejan escasa atención para terminar con esta práctica.
En este sentido AI hizo un llamado al presidente electo, Enrique Peña Nieto, a presentar un plan de acciones concretas con un cronograma específico y medidas de evaluación con indicadores que permitan pedir cuentas sobre la implementación de las medidas para erradicar la tortura.
El documento refiere que en 2011 la Comisión Nacional de Derechos Humanos recibió mil 669 informes de tortura y malos tratos a manos de policías y las fuerzas de seguridad, todos del ámbito federal.
"Considerable aumento con respecto a los mil 161 (casos de tortura y malos tratos) de 2010, mil 055 (casos) de 2009 y 564 (casos) de 2008", dijo, aunque estimó difícil determinar la verdadera magnitud y extensión de la tortura y otros malos tratos en México.
Refiriró que en los últimos tres años la organización internacional ha registrado informes de tortura en los 31 estados y el Distrito Federal, lo cual "nos hace reconocer que estos actos son generalizados y sistemáticos en el país".
El informe señala que cifras de la Procuraduría General de la República revelan que entre 2008 y 2011 se abrieron 58 investigaciones preliminares por tortura, mismas que dieron lugar a cuatro actas de acusación formal. De acuerdo con la Judicatura Federal en ese mismo periodo hubo 12 procesamientos por tortura, que dieron lugar a cinco sentencias condenatorias.