Cientos de viviendas, vehículos y negocios sufrieron severos daños al azotar la noche del domingo una fuerte tormenta y granizada en algunas zonas del área metropolitana, sin que se reportaran lesionados, reveló Protección Civil del Estado.
El mayor impacto del fenómeno meteorológico que se prolongó por casi una hora se dejó sentir en los municipios conurbados de Apodaca y Guadalupe.
Los vecinos de las colonias más afectadas narraron que en algunos casos el granizo tenía el tamaño de una pelota de beisbol, por lo que sus autos resultaron con parabrisas destruidos y carrocerías abolladas.