Dicen que los medicaban en el confesionario.
La versión israelí del Gran Hermano será objeto de debate la semana que viene en el Parlamento e investigada por una comisión especializada de la Autoridad de Radio y TV, tras revelar un diario que algunos de sus participantes recibieron medicación psiquiátrica. El escándalo que surgió hace unos días a raíz de las denuncias de varios de los participantes de ediciones anteriores. "Jugaron con nuestro cerebro", aseguró uno de ellos.