Sujeto a la aprobación de la empresa Impulsora Jalisciense, el acuerdo del Consejo de Administración de Pemex Refinación para un eventual borrón y cuenta nueva en su accidentada sociedad con Mexicana de Lubricantes plantea la eliminación de concesiones otorgadas inexplicablemente a la firma
De entrada, se plantea terminar con la exclusividad para venta de aceites y lubricantes de la cadena de gasolineras de la paraestatal… en cumplimiento a una resolución de la Comisión Federal de Competencia Económica… ¡de hace 10 años!
Lo inaudito del caso es que se desmantela la prebenda justo a un año de finalizar su vigencia, planteada para 20 años. El regalo se dio en 1993.
Más allá, se propone sustituir o modificar el contrato que se le había otorgado a la firma de capital mixto en exceso para el suministro de aceites básicos, celebrado el tres de octubre de 1990, y cancelando de pasadita el de maquila.
El primero de ellos obligaba a ofrecer precios "preferentes" a la compañía, y el segundo a realizar parte de su trabajo.
Sin embargo, no hay ningún resolutivo anexo que plantee la revisión de responsabilidades a los funcionarios que otorgaron las prebendas.
Y aunque se habla de una nueva etapa en la relación de negocios de una y otra compañías, por ejemplo la designación de dos consejeros independientes designados por parte de la empresa; la constitución de un Comité de Auditoría, y la designación de un subdirector de Finanzas con cargo a Pemex-Refinación, no se habla tampoco de resarcir a la paraestatal de ganancias escatimadas a lo largo de 20 años. En paralelo, se habla de la constitución de un Comité de Remuneraciones presidida por un consejero independiente, para evitar que los funcionarios privados se sigan despachando con la cuchara grande.
Como usted sabe, la firma dejó de transparentar sus estados financieros cuando estaba por acumular tres años consecutivos de pérdidas, lo que de acuerdo al contrato era condición para cancelar la sociedad.
La paradoja del caso es que en el escenario se habla de que en caso de que la Impulsora Jalisciense, propiedad de Salvador Martínez Garza, exdueño del equipo de futbol profesional "Guadalajara", acepte las exigencias de Pemex, debe convocar a una asamblea para aprobar sus estados financieros del 2001 al 2011.
Además, de desistirse de todos los juicios sin reserva de acción legal alguna… por más que la mayoría de éstos los promovió la empresa pública. De hecho, en uno de ellos, planteado por la Unidad Especializada de Investigación de Delitos Fiscales y Financieros de la Secretaría de Hacienda, se habla de que Mexicana de Lubricantes le generó un perjuicio económico a la empresa pública por más de 40 mil millones de pesos.
Lo curioso, además, es que una de las cláusulas de la resolución aprobada hace unos días, señala que "en el supuesto de que Impulsora Jalisciense no esté de acuerdo con las medidas propuestas, la administración de Pemex-Refinación le presentará al Consejo de Administración las medidas legales conducentes".
La firma tiene un mes para el sí o no… por más que la alfombra pareciera lo suficientemente mullida para caminarla sin más.
Lo cierto es que la sociedad nació chueca. De entrada, la licitación convocada por Pemex fue ganada por una firma llamada Operadora de Compuestos Químicos, quien le dejó el espacio a la Impulsora Jalisciense, creada después de realizada ésta.
En paralelo, Mex Lub contrató a espaldas de su socio un crédito de 60 millones de dólares en Banpaís, con la novedad de que se pagaron montos muy superiores a la cantidad convenida.Y si le seguimos, el préstamo lo contrató Mexicana de Lubricantes, no la Impulsora Jalisciense, a pesar que los recursos no se utilizaron en la operación de la empresa.Más allá, el presidente de la compañía, Salvador Martínez Garza, contrató créditos y operaciones mercantiles sin el consentimiento de Pemex.
Y no le seguimos por falla de espacio.
Borrón y cuenta nueva en el peor negocio que ha realizado Pemex a lo largo de su añeja vida.
BALANCE GENERAL
Este viernes se inicia en Vladivostok, Rusia, la Cumbre del Foro de Cooperación Asia-Pacífico en cuyo marco México intensificará sus negociaciones en la mira de su integración al Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP por sus siglas en inglés).
A diferencia del resto de los tratados mercantiles firmados por el país, en éste se incluyen temas como la movilidad laboral y la liberalización de servicios e inversiones, en un escenario que plantea la creación de cadenas globales de suministro e información.
En la zona de la Cuenca del Pacífico se genera el 86.42 por ciento de las exportaciones a nivel mundial, y se adquieren el 83.09 por ciento de las importaciones.
Nuestro país participa en el Foro de Cooperación Asia-Pacífico desde 1993.
Simultáneo a la reunión de jefes de Estado y de gobierno se realiza otra del Consejo Asesor de éste (ABAC por sus siglas en inglés), cuyos representantes titulares de México son Alejandro Ramírez, de la cadena Cinépolis, y Mauricio Millán, vicepresidente de Coraza Internacional.
Los temas a debatir en éste son la inclusión de las micro, pequeñas y medianas empresas en las cadenas globales de suministro; desarrollo de infraestructura en la región; integración de mercados financieros; seguridad alimentaria y desarrollo sustentable.
SALE SANTANDER
En lo que constituye la mayor oferta accionaria presentada en el mercado bursátil nacional, por más que una parte apunta al internacional, el grupo financiero Serfín espera recaudar el escándalo de cuatro mil 247 millones de dólares en la colocación del 25 por ciento de su capital.
La operación se realizará el 26 del mes que corre.
De acuerdo al prospecto de colocación, el precio de cada uno de los 293.9 millones de valores de la serie B oscilará entre 29 y 33.50 dólares.
El banco en su conjunto está valuado en 17 mil 235 millones de dólares.
En Estados Unidos la venta será en paquetes de American Depositary Shares, cotizándose éstos entre 10.99 y 12.70 dólares.
APUESTAS DE FERROMEX
Sorteados sus problemas, con la Comisión Federal de Competencia por la adquisición del Ferrocarril del Sureste, Ferromex está planeando una inversión a cinco años de dos mil 300 millones de dólares.
La apuesta le permitiría a la firma propiedad de Germán Larrea Mota Velasco incrementar año con año en siete por ciento su infraestructura para carga automotriz, mineral y de metales.
Adicionalmente, se adquirirán 50 locomotoras de última generación lo que permitirá arrastrar de 80 a 135 trenes diarios.
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