Bueno por dentro y por fuera
¿Qué mejor alimento para el desayuno que un delicioso huevo? Anteriormente eran muy criticados por aumentar el colesterol de manera significativa, ahora son indispensables para una dieta balanceada. Además de ser alto en proteínas, es benéfico para nuestra salud y se puede utilizar para prevenir enfermedades y para la belleza tanto interna como externa. La clara y la yema tienen un poder nutritivo y humectante que aporta múltiples propiedades para la piel y el cabello, y a demás son tratamientos sencillos de realizar.
La yema
Es la tercera parte del huevo y es la porción amarilla que muchos evitan por su alto contenido en colesterol, si se consume de manera moderada no tiene porque alertar a nadie. Está formada por lípidos y proteínas y es la mayor fuente de vitaminas minerales del huevo. En entrevista con un medio nacional, Josefina Morales de León, investigadora del Instituto de Ciencias Médicas, dice que se ha demostrado que ésta parte del huevo ayuda a prevenir afectaciones de la vista como cataratas, degeneración macular o daño a la retina, gracias a la luteína y zeaxantina que contienen y dan protección al ojo. La degeneración macular es la principal causa de pérdida de visión en adultos mayores de 50 años. Otros valiosos nutrientes con los que cuenta son vitaminas A, D, E, B12 y ácido fólico, que combaten la piel reseca y maltratada, y al ser rica en lecitina, suaviza el cutis. Aporta beneficios al cabello y cuero cabelludo, ayudándolo a crecer, suavizando la textura y nutriendo el folículo piloso. Para obtener un cabello más saludable basta con aplicar una yema batida y dejarla durante 20 minutos.
La clara
Es la textura transparente y el 90% está formada por agua. Hay quienes prefieren consumir sólo esta parte del huevo, sobre todo aquellos que quieren bajar de peso. Además de formar parte de una buena alimentación, la clara tiene otros beneficios para el cuerpo. Contiene vitaminas y minerales como magnesio, potasio, riboflavina, entre otros, y una serie de enzimas que actúan como barreras contra microorganismos. También está constituida principalmente por proteínas que ayudan a minimizar el tamaño de los poros, y si se aplica en el rostro durante 10 minutos puede lograr un efecto de levantamiento temporal y estiramiento. Sin embargo, esto puede dar una sensación de sequedad, por lo que no se recomienda a pieles resecas.
A pesar de lo que se pueda decir del huevo, siempre formará parte de una dieta balanceada y completa, tanto para aquellos que buscan bajar de peso como para quienes quieren aumentar su masa muscular. Otras maneras de hacer uso del huevo para la belleza son por medio de recetas caseras y sencillas que beneficiarán tanto a la piel como al cabello. Doctor en casa te muestra algunas de ellas:
Mascarilla para piel grasa
Esta mascarilla se utiliza para cerrar los poros y estimular la circulación. La clara de huevo extrae impurezas y tonifica el cutis, mientras que la avena nutre, suaviza y es exfoliante.
Ingredientes:
1 cucharada de avena pulverizada
10 gotas de aceite de almendra dulces
1 clara de huevo
½ taza de leche cremosa
Modo de aplicación:
Mezclar todos los ingredientes y aplicar sobre el cutis limpio mediante movimientos circulares. Dejar actuar durante 20 minutos y enjuagar después con agua tibia, y posteriormente con agua fría.
Mascarilla para piel mixta
La yema de huevo suaviza al igual que el aceite de oliva, y el aceite de limón ayuda a renovar la capa ácida natural de la piel.
Ingredientes
1 yema de huevo
3 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharada de jugo de limón
Modo de aplicación:
Añadir el aceite gota a gota sobre la yema mientras esta se bate constantemente. Después, agregar el jugo de limón y mezclar. Aplicar sobre cara y cuello y dejar actuar durante 20 minutos. Lavar con agua tibia y después enjuagar con agua fría.
Mascarilla para piel seca
Con esta mascarilla se reafirma la piel y suavizan las arrugas.
Ingredientes
1 yema de huevo
1/ 2 cucharadita de aceite de almendras dulces
1 cucharada de miel
Modo de aplicación:
Bata, con un tenedor, la yema de huevo y luego agregue el aceite de almendras. Continúe batiendo hasta que se unan bien. A continuación, agregue la cucharada de miel.
Coloque esta mascarilla sobre el rostro durante 25 minutos. Para removerla, use agua tibia.
Acondicionador para cabello maltratado o seco
Ingredientes:
1 yema de huevo
2 cucharadas de aceite de almendra o de oliva ligero
2 cucharadas de agua tibia
Modo de aplicación:
Batir el huevo hasta que cambie de color. Añadir el aceite hasta que quede bien mezclado, y posteriormente añadir el agua. Aplicar sobre el cabello y dejarlo actuar durante 20 minutos. Luego, lavar como de costumbre.
Fuentes:
www.zonadiet.com
www.eluniversal.com.mx
www.belleza-natural.com
www.utilisima.com
belleza.innatia.com