Consentir diariamente los pies, mantenerlos bellos y sanos, no debería ser un gran trabajo sino todo un placer, mucho más cuando vienen días de fiestas y vacaciones.
Después de jornadas agotadoras de trabajo o celebraciones los pies también merecen un descanso. Caminar mucho tiempo o estar siempre en sandalias, tacones altos, zapatos cerrados o con la piel expuesta bajo el sol y la arena tiene sus efectos, los cuales deben atenderse igual como se hace con cualquier otra parte del cuerpo.
Mantener atractiva esa valiosa estructura que sostiene e impulsa el cuerpo es, en cierto modo, un gesto de agradecimiento. Por eso es esencial seguir algunos pasos de cuidado básico como una periódica exfoliación e hidratación, también seleccionar un calzado cómodo y, por qué no, darse confortables masajes que relajan y hasta pueden aliviar otras tensiones corporales.
Afortunadamente, tanto damas como caballeros asisten en la misma proporción para atenderse y regalarse un momento de confort en los pies. La práctica les permite asegurar que, muchas veces, las molestias, endurecimientos de la piel, hongos son producto de un calzado inadecuado y de un mal corte de las uñas.
Por otra parte, explican que cuando se aproxima una época de fiestas, las damas suelen buscar zapatos de tacón alto que no siempre corresponden al arco que poseen en la planta del pie y resultan incómodos al caminar. "Ocurre que compran más por el diseño que por lo anatómico y luego vienen con los pies maltratados, dolor en el metatarso, callosidades, uñas partidas o enterradas -incluso, al entrar en contacto con la humedad, hasta hongos. No sucede tanto en los caballeros porque, por lo general, sus zapatos son de horma ancha y planos, pero igual ellos deben cuidarse, sobre todo en las uñas", advierte La Bella.
Tampoco es prudente usar siempre zapatos muy planos, al ras del suelo, que suelen adquirir los usuarios más por razones de comodidad y economía. Al seleccionar un calzado debe observarse que tenga un buen soporte en el talón, arco y metatarso (parte trasera, central y delantera). Y probarlos de pie, no quedarse sentado, caminar sobre ellos para saber cómo se sienten, así se chequeará la comodidad y que no queden apretados.
De acuerdo con lo que recomienda el quiropedista, el corte de las uñas debe ser recto, de forma cuadrada, para evitar molestias hacia los lados. Es recomendable mantenerlas al margen del nivel del dedo. Estas reglas valen tanto para hombres como para damas. También es conveniente aplicar algo de alcohol después cortarse las uñas, para prevenir infecciones.
Consejos prácticos para consentirlos
La piel de los pies igualmente refleja la dieta alimentaria que se lleva y los hábitos saludables que se siguen, de allí que la deshidratación por el bajo consumo de agua, por ejemplo, puede propiciar que los talones se cuarteen con facilidad. Una buena exfoliación ayudará a renovar la piel y puede hacerse en casa con una pequeña cantidad de azúcar y aceite de oliva.
Una vez exfoliados y enjuagados con agua limpia hay que hidratarlos con una crema especial que contenga emolientes o con aceite de almendra y, luego, puede aplicarse una loción refrescante. Es excelente colocarse medias para dormir porque, de esta manera, los productos penetrarán más en la piel. El director del centro quiropédico integral agrega que, en el caso de los caballeros, ellos tienen ventajas porque el uso de las medias disminuye la resequedad en la planta del pie, pero igualmente conviene prevenir la humedad entre los dedos y las uñas porque es causante de hongos.
Para aliviarlos del cansancio un consejo práctico es sumergirlos un rato en agua tibia con sales marinas disueltas y también lavanda. Luego es conveniente darse un suave automasaje con una crema mentolada, haciendo presión ascendente desde el talón hacia los dedos; también puede pasarse el puño cerrado de la mano, en movimientos circulares, por la planta del pie y, después, masajear los dedos estirándolos uno a uno.
Otra alternativa fácil de hacer en casa es poner un limón o una botella en el piso y colocar por encima el pie, moviendo la planta con presión en diferentes direcciones. Los efectos de seguir estas rutinas y hacerlas algunas veces antes de dormir se traducirán en un mejor descanso, relajación de las tensiones y activación de la circulación sanguínea.