Con la finalidad de conseguir una fuente de electricidad renovable, ingenieros aeroespaciales, buscan colocar en la órbita terrestre estaciones que capturen la energía que irradia el Sol. Con ello quieren evitar las variaciones climáticas que impiden que se aproveche esta luz. La energía captada sería transmitida a la Tierra a través de microondas o rayos láser. Uno de los usos potenciales que se piensa para esta tecnología es la de suministrar con electricidad a zonas de desastre, donde es necesitada con urgencia, aseguró BBC MUNDO. Además unidades militares también se verían beneficiadas, sólo serían necesarios pequeños receptores de rayos láser que darían independencia a estos dispositivos de los combustibles tradicionales. Otros usos que se plantean para esta tecnología es la enviar enviar energía a vehículos que exploran la Luna u a otros satélites. Para que esto sea posible y experimento tenga éxito es necesario ajustar las frecuencias con las que se transmitiría la energía, para así evitar peligros asociados al uso de microondas y el láser.
Los investigadores de la Universidad de Strathclyde, experimentan hasta ahora con materiales livianos que constituirían el satélite.
Por el momento se ha creado una estructura semirrígida con discos que tienen un fina capa de plástico metalizado. Varias de estas estructuras unidas podrían servir para capturar la luz solar y reflejarla a la Tierra.