María Espinoza será la primera mujer mexicana que busca refrendar su campeonato olímpico en Londres 2012. (EFE)
Juntos conformaron una dupla exitosa. Bajo el mando del entrenador Luis Onofre, la taekwondoín mexicana María del Rosario Espinoza fue campeona mundial en 2007 y un año después ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. Sin embargo, el binomio se separó.
La seleccionada nacional decidió dejar a Onofre, pues consideró que no era la persona adecuada para lograr la calificación a Londres 2012. El entrenador aún desconoce el motivo del distanciamiento por el que optó María.
“Hasta la fecha no he platicado con ella para poder decir el motivo de lo que sucedió, pero le deseo éxito”, dijo el otrora maestro de María, quien la considera como si fuera su hija.
“Somos [los entrenadores] los segundos padres y en algún momento se te van los hijos y así sucedió aquí”, agregó el profesor. Cuando María conquistó la medalla de oro en Beijing 2008 se cumplió uno de sus más grandes sueños.
“Vi culminado todo mi esfuerzo. Ganar oro fue algo que esperaba, porque el trabajo fue diseñado para eso. Fue dedicada a Dios, ami familia y a todas las personas que estuvieron involucradas”, recuerda la oriunda de Sinaloa.
Después de dicho logro vino un declive en la carrera deportiva de Espinoza.
Llegó el Campeonato Mundial de Taekwondo 2011, pero la sinaloense no pudo refrendar su título, tampoco compitió en los Juegos Panamericanos y se fracturó la relación con Onofre; así que puso su destino en manos de Pedro Ignacio “Gato” Cruz, quien logró clasificarla a Londres.
Serán los segundos Juegos Olímpicos de Espinoza. Ella será la portadora de la bandera mexicana durante el desfile de la delegación azteca durante la ceremonia de inauguración.