A Nery Castillo se le nota el hartazgo. Quiere que su equipo deje el juego ratonero para no sufrir por ir atrás del balón. Cansado Nery Castillo de que Pachuca juegue a la defensiva
Nery Castillo está harto de correr atrás del balón todo el tiempo. No soporta que su equipo defienda sin respuesta, que se conforme con defender las ventajas magras y que abuse de aguantar a los rivales durante 70 minutos o más. Nery quiere arriesgar.
La estrategia defensiva es contraproducente para el delantero del Pachuca. Por eso lanza la convocatoria a los suyos a dejar el juego ratonero para manejar el esférico y no ceder a la fatiga por ir detrás de éste toda la vida.
"No es el esquema [lo que debe cambiar], es entre nosotros. No meternos atrás, salir con la pelota, arriesgar más. Con Cruz Azul metimos el gol y no llegamos más en 60, 70 minutos y nos atacaron. Si te defiendes, a la larga terminas por dejar ir los puntos así", avisa el ariete.
Cuatro goles en siete fechas. A Castillo le molesta la estadística. Le parece mal que un plantel del poderío tuzo tenga una cosecha pírrica.
En su molestia, encuentra la explicación. Los pocos goles hechos por el Pachuca responde -de acuerdo con Nery- a que también han concedido pocos (7), porque han pasado más tiempo metidos en su marco que en pensar atacar.
"Defensivamente andamos bien porque nos defendemos, tuvimos la suerte de que aguantamos mucho con Cruz Azul. El tema es atacar desde atrás. Tenemos que salir más, tocando más, porque si no tenemos opciones, es imposible convertir", lamenta el delantero.
El cuadro hidalguense ha dejado ir al menos tres puntos en los últimos momentos de los partidos. Ante Toluca apostó a la solidez de su zaga el empate a cero; contra los Cementeros la ventaja de 1-0. En ambas no funcionó.
"En el partido pasado [ante La Máquina] nos metieron muy atrás, después de haber hecho el gol. En el final perdimos puntos muy valiosos con los que ahora estaríamos en un mejor lugar", explica y de inmediato expresa optimismo ante el receso liguero por la Fecha FIFA. "Estas dos semanas hemos jugado mejor".
Castillo evita hablar de deudas personales. Siente que el mal accionar colectivo ha provocado que las individualidades tuzas carezcan de peso.
La oportunidad ante Morelia puede servir como un parteaguas para lo que resta de la temporada del Pachuca.