Elecciones en Grecia. El líder de la Coalición de la Izquierda Radical (Syriza), Alexis Tsipras.
Los votantes griegos, enfurecidos por una crisis financiera prolongada y cruel, castigaron ayer domingo a los partidos que han dominado la política durante décadas, y las proyecciones de los resultados electorales mostraban que el apoyo popular pasó a los grupos antirrescate, pero que ningún partido tenía los votos suficientes para formar un gobierno.
Respondiendo rápidamente al voto de protesta, los dirigentes de los partidos en primero y segundo lugares se comprometieron a buscar la renegociación de los términos del acuerdo de rescate internacional a Grecia, de miles de millones de dólares, o simplemente anularlos. Más de dos años de reiteradas medidas de austeridad a cambio de préstamos de rescate de parte de otros países de la Unión Europea y el FMI llevaron a Grecia a caer en una recesión profunda que ha hecho que la tasa de desempleo se dispare y que decenas de miles de empresas se hayan ido a la bancarrota. El sufrimiento enfureció a los votantes, que ayer asestaron un golpe duro al dominio de décadas de los dos principales partidos del país: el socialista PASOK y el conservador Nueva Democracia.
Ambos, que se han alternado en el poder desde el final de la dictadura de siete años en 1974, habían logrado coexistir en una alianza incómoda durante los últimos seis meses, como una coalición de gobierno improvisada que asegurara un segundo acuerdo de rescate y la amortización de deuda más grande de la historia.
Las proyecciones oficiales de ayer mostraron que Nueva Democracia ganó un 18.9% de los sufragios, dándole 108 escaños en el Parlamento de 300 miembro, muy por debajo de los 151 necesarios para formar un gobierno.
Se proyectó que el partido izquierdista Syriza, que lucha contra el plan de rescate, quedaría en segundo lugar con un 16.8% y 51 escaños. El exmayoritario partido socialista PASOK quedó a la zaga, con 13.4% y 41 asientos.
Se esperaba que el Partido Amanecer Dorado, de extrema derecha -que se basó en una plataforma antiinmigrante y propuestas como la de colocar minas terrestres a lo largo de las fronteras de Grecia- reciba un 7% de los votos, lo que le daría 22 diputados en el Parlamento.
