¡Vengo como alma que lleva el diablo! De a tiro pensé que no iba a llegar nunca a la oficina, es que eso de andar en doctores, ya sabe en los chequeos generales, pos se me fue toda la mañana. Pero ahora más que nunca tenía que venir para chismear con Conchis y Licha, oiga es que ¿cómo está eso que la Katie Holmes y el guapérrimo de Tom Cruise se van a divorciar?
Lo primero que pensé cuando supe la noticia es que por fin San Antonio me estaba haciendo justicia, es que mire, yo todos los días le pido que me mande un novio así como él: de ojo de color, guapo, amable, rico… pos casi nada, y ándele que me entero del divorcio, si yo siempre lo dije: ¡Tom está hecho para mí y yo para él!
Ya dejándome de cosas fíjese que me impresionó mucho lo de la separación, sobre todo por la manera en que sucedió todo, así tipo película. Pos resulta que la Katie (quien dicho sea de paso nunca ha sido santa de mi devoción y mucho menos mi actriz favorita) lo tenía todo perfectamente planeado. Ayer una revista muy pipirisnice publicó que mientras la muchachita ésta le decía a su marido por teléfono que lo amaba, su círculo más cercano preparaba la huida cambiando sus números de teléfono, correos electrónicos y despidiendo a sus asistentes, por supuesto con la intención de que el actor no pudiera contactar a Katie ni a nadie de su familia.
Así como lo lee. Desde principios de junio Catita se mudó a un apartamento en Nueva York mientras Cruise rodaba una película en Islandia. Ella nada tonta le dijo que se cambiaba porque la nueva casa tenía un estacionamiento subterráneo en el que podría resguardarse de los paparazzi. Pos a mi Tomasito le pareció bien, pero zaz, que la muchachona ya no quería nada con él y mucho menos con la Cienciología, ya sabe, la iglesia esa a la que Tom metió a su mujer e hija y de la que tanto se ha hablado. Así es, dicen las malas lenguas que Katie Holmes deseaba alejar a su pequeña Suri de esa secta, creencia o como usté le quiera llamar, y para lograrlo sólo podía ser separándose de Cruise, y claro, él fue el último en enterarse.
Si yo siempre he dicho que todo se acomoda y la verdá voy con todo para conseguir el amor de Tom y más ahora que leí una declaración que hizo la güera esa desabrida de Cameron Díaz (nótese que no le tengo envidia, eh?), pos así sin tantita pena dijo que le encanta practicar el sexo y cuantas más veces mejor porque tener relaciones sexuales es bueno para la salud y eleva el espíritu, ¿qué tal? Entonces no le voy a echar mentiras: ya me vi con el Tom, ¡agárrate guapote porque voy con todo por ti!
Y hablando de hombres chulos, pos que me entero que David Zepeda y Mark Tacher no se hablan. Fíjese nomás, ellos que son medios hermanos en Abismo de Pasión, que los une la amistad y la sangre, en la vida real ni se dirigen la palabra, y es que varios rumores aseguran que al Zepeda ya se le subió la fama.
Unas comadres me platicaron que todo empezó un día que Mark saludó a su compañero ahí en el set y David ni lo volteó a ver, y pos ya sabrá, el güero se enojó porque pos ante todo la educación, ¿verdad? Y optó por no dirigirle más la palabra. Recordemos que Mark tiene su carácter, pues durante la grabación de la telenovela Triunfo del Amor, se desató una pelea con su compañero William Levy, aunque luego hicieron las paces.
Y ya pa terminar porque ando bien hambreada, ¿qué cree? Resulta que Tatiana sigue viviendo un infiernito junto a Roberto Romagnoli, productor de su programa El Show de Tatiana. Hace tres meses la hizo llorar, pero ahora la ha presionado a bajar de peso, al punto de que la cantante se desmayó. Pos a ver en qué para todo esto, pero a mí se me hace que en nada bueno, además su programa no ha tenido el éxito esperado. Pos ya Dios dirá, yo por lo pronto, pa que no me pase lo mismo que a la cantante, voy a echarme unos tacos para poder acabar mi jornada tan lúcida y activa como siempre. Comentarios: aplaudiendoychiflando@ yahoo.com.mx
