La agencia de noticias PAP informó que la policía utilizó cañones de agua y gas lacrimógeno para sofocar los disturbios. Chocan aficionados con Policía en jornada difícil
Hinchas violentos se enfrentaron ayer contra grupos rivales y la Policía antes y durante el partido de la Eurocopa de futbol entre Polonia y Rusia, con un saldo de 15 lesionados y más de 140 personas detenidas.
Luego de desmanes aislados a primera hora del día en la capital polaca, la policía debió disparar balas de goma y descargas de gas lacrimógeno durante la noche contra un grupo de hinchas que los atacaron con botellas de vidrio mientras miraban en pantallas gigantes el partido.
Los enfrentamientos se produjeron cerca de una zona de hinchas del sitio donde aproximadamente 75 mil personas observaban el partido que terminó con un empate 1-1.
Ninguno de los heridos, entre los que se encuentra un policía, sufrió lesiones que pongan en riesgo su vida.
Aproximadamente 5 mil aficionados rusos marcharon rumbo al partido en el Estadio Nacional para celebrar el feriado del Día de Rusia, lo cual fue considerado por muchos polacos como una provocación.
Polonia tiene una historia de relaciones complicadas con Rusia, incluidas las décadas de control ejercido por Moscú durante la Guerra Fría. Muchos polacos señalaron que las autoridades no debieron haber permitido a los rusos marchar como grupo en Varsovia dadas las heridas históricas.
Uno de los incidentes más violentos ocurrió durante la marcha. Hooligans polacos atacaron a los rusos, quienes respondieron violentamente. Las dos partes, compuestas de decenas de hombres, se patearon y golpearon mutuamente, mientras se podía ver cohetes explotando entre ellos.