La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ha recibido 91 quejas por presuntos abusos cometidos en contra de mujeres y hombres indígenas que están en prisión, de enero de 2011 a la fecha, por lo que se pronunció porque en el país se garanticen las condiciones para que este sector tenga acceso a un sistema de procuración e impartición de justicia eficaz.
El organismo nacional, en un comunicado, detalló que "la detención arbitraria, ausencia de traductor o intérprete en los procesos, falta de atención médica y omisiones en el otorgamiento de la libertad preparatoria, son algunas de las violaciones a los derechos de indígenas que cumplen una condena en cárceles del país".
Informó que actualmente existen ocho mil 634 indígenas internados en cárceles del país, de los cuales 306 son mujeres. De esta población la CNDH "ha atendido 91 quejas por presuntos abusos cometidos en contra de mujeres y hombres indígenas, internos en diversos centros penitenciarios".
Además, en 313 casos donde no se acreditó la competencia de la Comisión Nacional para conocer del asunto, éste fue turnado a organismos estatales de derechos humanos para su atención y seguimiento.
El organismo nacional señaló que a través del Programa de Gestión de Asuntos sobre Beneficios de Libertad Anticipada para Indígenas, realiza visitas a las cárceles del país para entrevistarse con los afectados y analizar sus expedientes.
Esto ha permitido que en el mismo periodo otorgara más de mil servicios de orientación sobre el cumplimiento de las penas, promoción de recursos en causas penales y defensa pública; también da asesoría para libertades anticipadas.
"Las visitas efectuadas han permitido constatar que las etnias que presentan mayor población penitenciaria son la náhuatl, maya, tzotzil, mixteca y zapoteca", informó.
Respecto a este sector, la CNDH indicó que "es necesario garantizar el acceso a un sistema de para las personas que forman parte de un grupo étnico y quienes en muchos casos no hablan español".