Jan Ader tuvo el voto a favor de 262 miembros del Parlamento húngaro para ser elegido nuevo presidente del país. EFE
El Parlamento húngaro confirmó a Jan Ader como el nuevo presidente de Hungría en sustitución de Pál Schmitt, quien renunció hace un mes en medio de un vergonzoso escándalo de plagio sobre su tesis de doctorado de 1992.
Ader, quien es cofundador del Partido Fidesz, cercano al primer ministro, Viktor Orban, y miembro del Parlamento Europeo desde 2009, fue elegido como presidente con 262 votos a favor y 40 en contra, según un reporte del sitio húngaro Politics.Hu.
La elección de Ader, de 52 años de edad, era esperada, pese a la oposición del partido de extrema derecha Jobbik, que sufragó en su contra y que la votación fue boicoteada por algunos partidos pequeños de oposición.
Ader nominado por Orban, el mes pasado, días después de la dimisión de Schmitt el pasado 2 de Abril, tras ser despojado de su doctorado de 1992, asumirá formalmente su cargó el próximo 10 de mayo.
En su primer discurso ante el Parlamento, después de prestar juramento, el nuevo presidente de Hungría hizo un llamado a la reconciliación y unidad de todos los partidos para trabajar por el bienestar del país.
"Tenemos diferentes valores, diferentes convicciones y fe, pero todos tenemos un país, y es Hungría", subrayó Ader, quien será el quinto presidente de la República desde el cambio de sistema político, a fines de 1989.
Mi creencia, agregó, es que los húngaros podremos demostrar nuestra vitalidad sólo si somos capaces de discutir nuestros problemas, suavemente en alguna ocasión, y ferozmente en otras si fuera necesario, pero siempre manteniendo nuestro respeto mutuo.
Ader también destacó la importancia de defender la Nueva Constitución de Hungría, que entró en vigor el 1 de enero de este año. "Como presidente no escatimaré ningún esfuerzo para cumplir mi parte de esa responsabilidad como se estipula en la ley fundamental”, destacó.
En Hungría, el presidente tiene un papel principalmente ceremonial, aunque es el jefe del Ejército y debe firmar toda legislación, después de ser aprobada por el Parlamento.
