La reciente conquista de la cuarta estrella regresa a la Comarca un añorado clima lleno de sentimientos de ánimo, solidaridad y fraternidad. Esto se veía venir desde el dramático pase a la final, y ha permeado positivamente con la obtención del campeonato en todos los sectores de la población, aún en los más resistentes a aceptar el fenómeno social que representa el futbol.
Comentando con amigos sobre algunas anécdotas ligadas a la unión que ha hecho fuerte a la Comarca, recordábamos actos como la colecta popular organizada por un club de servicio con la finalidad de reunir fondos para comprar la vacuna contra la poliomielitis allá por los lejanos años 60, todo lagunero cooperó solidariamente viendo en cada niño lagunero al propio. En los mismos 60 en la inundación muchos laguneros abrieron las puertas de sus casas en un acto de solidaridad dando cobijo a los que perdieron sus propiedades. Los años 70 y 80 casi nos hicieron olvidar esta costumbre, a no ser por la solidaridad nacional en el terremoto del 85.
Recientemente nuestros niños nos han hecho recordar el viejo espíritu dando el ejemplo de fraternidad llevando a sus escuelas algún alimento o ropa para ayudar a los tarahumaras azotados como todo el norte del país por la sequía.
Hoy deseo, como muchos laguneros, el regreso de la paz, tranquilidad y bonanza que hicieron de esta Comarca un lugar elegible para vivir, personas mayores que vinieron de otros lugares nos dieron y nos siguen dando el ejemplo de su amor por estas tierras, en días pasados platicando con don Hermilo Payán me decía que cuando llegó a La Laguna supo que no se había equivocado, y a pesar de que su actividad laboral lo llevó a otras ciudades y a la misma capital de nuestro país, siempre pensó en regresar aquí, me expresó además la satisfacción de escuchar a Emilio Fernando Alonso cuando se refiere a nuestra ciudad como la ciudad de los grandes esfuerzos.
Que sirva este campeonato tan deseado para despertar a la Comarca y unirnos en la recuperación de nuestro espíritu de lucha, de nuestros valores y para consolidar y recordarnos nuestra identidad de tierra de esfuerzo, trabajo y sacrificio. Va además un sincero reconocimiento para Benjamín Galindo y su cuerpo técnico formado por Héctor Adomaitis, Héctor López y el profesor Luiz Otavio Duarte, todos ellos campeones ya en alguna ocasión con los colores verdiblancos, su trabajo y entrega nos han regalado grandes momentos de alegría y esperanza tan necesarios para La Laguna. ¡Felicidades a todos los laguneros! Y ¡hasta la próxima!
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