La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que 53 zonas ecológicas del Estado de México son afectadas por diversos delitos ambientales, especialmente la tala clandestina.
De acuerdo con la respuesta a la solicitud de acceso a la información número PFPA/5.3/12C.6/ son ocho los áreas naturales en Edomex, catalogadas con una “alta” depredación.
Éstas son: el corredor Iztaccíhuatl-Popocatepetl, el parque Lagunas de Zempoala, el Cobio Chichinautzin. Así como también las áreas naturales protegidas Santuario del Agua y Forestal Manantiales Cascada Diamantes, El Salta de Atlautla-Ecatzingo, el Sisterma Tetzcotzingo y La Bufa Otomí-Mexica.
La Profepa indica que las áreas naturales catalogadas con un nivel “medio” en delitos ambientales son 25, algunos de ellos son el Parque Mariposa Monarca, el Nevado de Toluca, la cuenta del Río Valle de Bravo y el Bosencheve.
Además del santuario del agua Valle de Bravo, Río Grande San Pedro, el parque Chapa de Mota, el Nahuatlaca-Maltazinca, la sierra de Nanchititla, y Forestal Presa Taxhimay, por mencionar algunos.
La mayoría de los árboles talados clandestinamente en estos bosques del Estado de México son el cedro, el encino, sauce, sauce llorón, fresno, nogal, oyamel, táscate, tepozán y pino, de acuerdo con el informe del Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
Las áreas naturales de la entidad con tasas bajas de depredación por tala y otros delitos ambientales son 20, algunos de ellos son el Santuario Corral de Piedra, Santuario Presa Borckman y Victoria, el Cerro de Chiluca y Malpais de Santo Tomas de los Plátanos.
En octubre pasado la Protectora de Bosques del Estado de México, indicó que sólo seis bosques de la entidad son afectados por la tala clandestina y otros delitos ambientales, y no los 53 que indica la Profepa, entre los que estaban Xalatlaco, Ocuilan, Amecameca, San José del Rincón, Temascaltepec y Valle de Bravo.