Tendencia. Grecia y España son dos economías severamente afectadas por la crisis. (ARCHIVO)
La sociedad española será la verdadera rescatista de la banca, pues será quien cargará con el barril sin fondo en que se ha convertido la crisis financiera de ese país, estimó Consultores Internacionales S.C. (CISC).
España ha entrado en su segunda recesión en tres años con un costo social en aumento, pues se espera que las autoridades gubernamentales recrudezcan las severas medidas de autoridad que ya han aplicado.
Refirió que la crisis económica-financiera mundial cumple ya cinco años de pesar gravemente sobre todas las economías del mundo, aunque algunas han sido más afectadas, como Grecia y ahora España.
España ya entró a su segunda recesión en tres años, lo que ha tenido un impacto directo en materia laboral, tanto que uno de cada cuatro españoles está sin empleo, en tanto que si se toma a los jóvenes menores de 25 años la tasa se dispara a 52 por ciento.
En su más reciente actualización de las perspectivas económicas, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó una caída de la economía española en 2012 de 1.7 por ciento y para 2013 de un 0.6 por ciento de decremento. No obstante, el Ministerio de Finanzas español calcula que la contracción económica en 2013 será más pronunciada que la prevista, lo cual sin duda demorará la recuperación del empleo. En ese sentido, destacó CISC, la crisis financiera española "es una especie de barril sin fondo, al grado de que los esfuerzos constantes que desde 2009 han realizado los gobiernos para solucionar los problemas del país se han prácticamente desperdiciado sin llegar a solución alguna".
De acuerdo con la consultoría, uno de los factores más importantes que agudizan la crisis es la situación que se vive a nivel de endeudamiento de las regiones autonómicas.
Italia coloca bono
Italia colocó cinco mil 480 millones de euros en bonos del Tesoro (BTP) a cinco y diez años con una caída en el rendimiento a pagar y una demanda positiva, informó el Ministerio del Tesoro.
Explicó que el techo máximo a colocar eran cinco mil 500 millones de euros.
Dijo que los bonos a diez años pagaron un rendimiento promedio del 5.96 por ciento, frente al 6.19 por ciento de la subasta precedente. Por su parte, los Btp a cinco años tuvieron un interés del 5.29 por ciento en comparación con el 5.84 por ciento del mes pasado. Asimismo, el Tesoro vendió en otra subasta Btp de una emisión anterior con plazo a noviembre de 2015 y rendimiento del 4.49 por ciento.