Cristiano dice sentirse triste por una situación profesional. (EFE)
El portugués Cristiano Ronaldo, cuyas declaraciones sobre su malestar en el Real Madrid han causado enorme revuelo, se incorporó hoy a la concentración de la selección lusa en silencio y con "la solidaridad" de su representante, Jorge Mendes.
Junto su colega del Real Madrid Pepe, Cristiano ingresó en el hotel Praia d'El Rey de Óbidos, 80 kilómetros al norte de Lisboa, sobre las 17.00 horas locales sin prestar declaraciones a los numerosos periodistas portugueses y españoles que le esperaban.
El "7" del Real Madrid, que arrastra molestias físicas del partido liguero de ayer ante el Granada, en el que marcó dos goles, tuvo autorización para no entrenarse junto a sus colegas al igual que el propio Pepe.
Portugal comenzó hoy a prepararse para la fase de clasificación al Mundial del 2014, cuyos primeros partidos son contra Luxemburgo, el 7 de septiembre a domicilio, y Azerbaiyán, el 11 en casa.
A pesar de haberse comprometido, Cristiano tampoco asistió hoy al homenaje que el Sporting prestó a Aurelio Pereira, el entrenador que le dirigió durante sus años en la cantera del Sporting.
Debido a las especulaciones en torno a las manifestaciones de insatisfacción del futbolista más caro del mundo, su representante, el portugués Jorge Mendes, respaldó a su representado a través de un comunicado divulgado hoy por la empresa que dirige, Gestifute.
"Las declaraciones de Cristiano Ronaldo se basan en razones que conozco (...) Esas declaraciones no me sorprenden y mucho menos me incomodaron; Quien conoce la relación que me une a Cristiano Ronaldo sabe que él contará siempre con a mi total solidaridad", resaltó.
