El Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad consideró que la nueva Ley de Atención y Protección a las Víctimas, es una “simulación” que demerita el trabajo legislativo del Congreso que terminó su gestión la semana pasada.
Para el activista social la nueva iniciativa “rebaja la dimensión de la urgencia nacional, ya que no tama en cuenta el dolor de las víctimas ni da cuenta de las violaciones a los derechos humanos que ha ocasionado la guerra contra el narcotráfico”.
En teleconferencia desde Estados Unidos recordó que el movimiento solicitó al presidente Felipe Calderón Hinojosa “honrar la palabra empeñada frente a los integrantes de esta agrupación en el Alcázar del Castillo de Chapultepec, retirar la controversia constitucional que promovió en la SCJN, obedecer la Constitución y publicar la Ley que aprobó por unanimidad el pasado Congreso de la Unión”.
A su vez, otro de los miembros del movimiento y presidente de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, Silvio Cantú, y el penalista Julio Hernández Barros, manifestaron que “con la nueva iniciativa se pretende suplantar una ley de derechos humanos de las víctimas por una de asistencialismo”.
Consideraron que la nueva iniciativa es un retroceso al derecho constitucional de las víctimas de violaciones de derechos humanos a recibir la reparación integral del daño.