El tema lo puso en la mesa Emanuel Villa. (jammedia)
Visitar el estadio Olímpico Universitario se ha convertido para los equipos rivales en un cheque al portador para sumar puntos, ya que Pumas apenas ha ganado dos partidos de los últimos 12 que ha disputado en su cancha, donde la "ventaja" de jugar al mediodía se ha esfumado gracias a la ineficacia del cuadro universitario.
El tema lo puso en la mesa Emanuel Villa. El delantero argentino afirmó el martes pasado que antes sacar puntos de CU era casi un milagro, pero ahora son muy pocos los visitantes que no se llevan al menos uno de vuelta a casa.
Los números son claros. En el pasado torneo, el Clausura 2012, los felinos tuvieron su peor cosecha como locales en torneos cortos, con apenas seis puntos ganados quedaron por debajo de los siete conseguidos en el Invierno de 1997.
La situación en el torneo actual no es mucho mejor, ya que pese a iniciar con un triunfo de 3-0 sobre Querétaro, suma tres derrotas en fila ante Toluca, Cruz y San Luis, así que contra Puebla le urge ganar para al menos igualar la media docena que logró en el citado torneo Invierno 1997.
En el certamen anterior tuvo un inicio similar, cuando goleó al Morelia 3-0, pero después apenas rescató tres empates y fue incapaz de ganar en el resto del torneo jugando en su cueva.
En cuanto al número de derrotas como local, hoy no está muy lejos de las cinco que sufrió el equipo en el Invierno de 1996, cuando bajo la dirección técnica de Pablo Luna y Luis Flores cayeron en cinco ocasiones, y hasta la fecha 12 sólo habían sumado un punto en CU, gracias a un empate contra el Monterrey.
En los torneos de Apertura 2005 y Clausura 2005, con Hugo Sánchez como estratega, también acumuló cinco caídas en cada una de las campañas, racha que contribuyó para que la institución se metiera en problemas de descenso.
Aunque la temporada en la que más veces perdió fue en el Apertura 2004, en la que sufrió seis tropiezos. Con todo y eso le alcanzó para calificar y a la postre, lograr el bicampeonato.
Es una realidad que Pumas ha dejado de ser el equipo punzante y dinámico que agobiaba al equipo rival, cualidad que, aunada a las altas temperaturas bajo las que suele jugar y la contaminación, terminaban por ahogar a sus rivales. Hoy eso es un mito que debe renovarse con triunfos claros en la cancha.