Beneficio. El regidor Víctor Chaúl García dijo que debe procurarse beneficiar al municipio, en este caso buscándole otra utilidad a la planta.
Además de la legalidad, las autoridades deben procurar el beneficio de sus acciones para el municipio, lo que no se percibe con la concesión por 30 años del agua tratada a un particular al mismo precio que se ha ofrecido siempre, dijo el regidor Víctor Chaúl García, integrante de la Junta Directiva del Sideapa.
Refirió que de acuerdo con las especificaciones del contrato, en éste no se aclara si en algún momento de todo ese tiempo el municipio podrá dejar de vender al cliente para buscar otra opción, y de ser así la inversión de 25 millones de pesos que se tiene contemplada para mejorar los procesos de la planta Oriente, sería inútil.
A su consideración, se debe buscar sacar el mayor provecho a la tratadora, la que implicó una inversión millonaria pero genera más gastos que ingresos pues mientras el metro cúbico de agua se seguirá vendiendo a 38 centavos, su tratamiento previo cuesta casi dos pesos.
Actualmente la planta de tratamiento genera un volumen aproximado a 100 litros por segundo y éste será canalizado en su totalidad a la persona que ganó la licitación, el agricultor José Luis Padilla.
A diferencia de la planta Oriente, que estaba contemplada para otros usos, la tratadora Norte sí se creó con la única finalidad de tratar el agua para uso agrícola.
