Legisladores criticaron ayer la decisión del Gobierno Federal de ocultar la cifra de homicidios relacionados con el crimen organizado en el actual sexenio y la atribuyeron a un deseo de evitar un balance negativo de la administración.
"Esa información no sólo debe estar en manos de las autoridades para tomar decisiones, sino de las organizaciones no gubernamentales y de la propia ciudadanía", dijo el diputado del PAN, Agustín Castillo.
El Gobierno Federal se ha negado a publicar la cifra de homicidios ligados al crimen organizado. La semana pasada se reveló que los datos se mantendrán reservados.
La última vez que se publicó el dato de fallecimientos por rivalidad delincuencial fue el 30 de septiembre de 2011 y a esa fecha se contaban 47 mil 515 muertes desde el 1 de diciembre de 2006.
El senador del Verde, Tomás Torres, dijo que ocultar las cifras es inútil. "De cualquier forma se van a saber y lo único que va a propiciar es un mayor debate", afirmó.
El vicecoordinador de los diputados del PRD, José Luis Jaime, dijo que la decisión se da "por los malos resultados" en seguridad y refleja la "estrategia fallida" del Gobierno Federal.
Mientras que la cifra de asesinatos se mantiene oculta, también hay discrepancias entre las bases de datos que registran los homicidios en el país.
El Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) reconoció que no está lista la nueva base de datos con cifras de homicidios dolosos y desapariciones acordada por el Gobierno Federal y los estados a pesar de que se fijó como plazo el 15 de junio.
Según el SNSP, las procuradurías estatales no han enviado los datos necesarios para integrar el conteo.
