Productos que contienen químicos como el alcohol, el alcanfor, los parabenos, el amonio, el mercurio y la urea pueden producir daños dermatológicos y neurológicos a los bebés. INGIMAGE
La piel de los bebés es muy diferente a la de los adultos, los jóvenes e incluso la de los niños, ya que es más sensible, más delgada, más delicada y más absorbente.
Existen varios químicos usados por las industrias que elaboran productos como cremas o lociones y que pueden causar daños dermatológicos y hasta neurológicos a los bebés.
Estos químicos son el alcohol, el alcanfor, los parabenos, el amonio, el mercurio y la urea.
Se recomienda verificar que los productos usados para la limpieza y cuidado de los bebés tengan las menores cantidades posibles de estos químicos pues los daños pueden ser graves.
En general, los químicos mencionados producen irritación, enrojecimiento, descamación y escoriación, pero la urea puede causarles problemas circulatorios y el mercurio ocasiona daños neurológicos.
La recomendación es, pues, revisar los componentes que se utilizan para fabricar los productos que se aplican a bebés y acudir con un médico especialista si se nota algún cambio en la piel de estos al utilizar tales productos.
^AC