Llegada. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama (d), es recibido por el embajador estadounidense en Colombia, Michael McKinley (i), y la viceministra colombiana de Relaciones Exteriores, Monica Lanzetta (c), a su llegada al aeropuerto Rafael Núñez de Cartagena (Colombia).
Venezuela y Argentina advirtieron que la VI Cumbre de las Américas podría carecer de una declaración final, luego que Estados Unidos y Canadá rechazaron incluir una invitación a Cuba para que asista a las siguientes citas continentales.
El canciller venezolano Nicolás Maduro y el argentino Héctor Timerman informaron que las delegaciones estadounidense y canadiense vetaron la inclusión de Cuba en la declaración final que firmarán los presidentes en la Cumbre de este fin de semana.
"Con este veto se elimina cualquier posibilidad de emitir una declaración política de la sexta Cumbre" de las Américas, declaró Maduro al finalizar la tarde de ayer viernes la segunda jornada de la reunión de cancilleres, previa al encuentro de jefes de Estado.
El canciller venezolano criticó fuertemente la posición de Washington y Ottawa y advirtió que en este momento "tenemos dos Américas: una mestiza y solidaria y la otra imperial; del consenso de Washington pasamos al consenso sin Washington y América Latina".
Por su parte, Timerman agradeció a los países de América Latina el respaldo que le dieron a su demanda de soberanía en las Islas Malvinas, ocupadas desde hace 30 años por Reino Unido.
Sin embargo, lamentó que este apoyo no pudiera estar en la declaración final que se proyectaba elevar a los jefes de Estado debido al veto de Estados Unidos y Canadá a la inclusión de Cuba.
Los dos cancilleres manifestaron a la prensa, tras salir de la reunión en el Centro de Convenciones de Cartagena, que no es procedente elevar una declaración política al encuentro presidencial con el sello del veto de los dos países norteamericanos.
Maduro anunció que las naciones de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) se reunirán para tomar la decisión de no regresar a las Cumbres de las Américas.