El papa Benedicto XVI impondrá mañana viernes en la Basílica de San Pedro, en Roma, el palio arzobispal a Francisco Robles, cardenal de Guadalajara y a Jesús Carlos Cabrero, recién nombrado arzobispo de San Luis Potosi, en el marco de la solemnidad de los apóstoles Pedro y Pablo.
El cardenal Robles Ortega aprovechó su mensaje semanal para informar sobre su próximo viaje a Roma donde recibirá de manos del Santo Padre el palio arzobispal, el cual impondrá a todos los arzobispos del mundo nombrados el último año.
Explicó que entre las tareas que debe realizar el arzobispo de Guadalajara está buscar la comunión entre los obispos de esta Provincia Eclesiástica integrada por diversas Diócesis de esta región: Autlán, Ciudad Guzmán, Colima, San Juan de los Lagos, Aguascalientes, Tepic y El Nayarit.
"Todas estas Diócesis conforman la Arquidiócesis de Guadalajara y me corresponde a mí ahora ser enlace, el signo de comunión entre los hermanos obispos de estas Diócesis", afirmó el Cardenal Robles.
En este contexto, el prelado reconoció "que el mundo está fuertemente marcado por la división. Por muchos motivos tendemos a dividirnos", sin embargo, "los seguidores de Cristo debemos dar testimonio".
Por ello, exhortó a que "seamos siempre y bajo toda circunstancia, agentes y servidores de la comunión de Dios para manifestarlo al mundo y para crear las circunstancias más acordes al desarrollo de todos".
El palio es una prenda litúrgica que el arzobispo viste en ocasión de alguna solemnidad, principalmente fuera de su territorio episcopal, signo de su autoridad y comunión con el obispo de Roma, y con las Diócesis sufragáneas a la Provincia Eclesiástica.
Se trata de banda de lana blanca, de entre cuatro y seis centímetros de ancho, de forma circular y decorada con cruces; de ella caen dos tiras cortas en sentido vertical sobre el pecho y la espalda. Lleva seis cruces de seda negra bordadas longitudinalmente, cuatro de ellas en la banda circular y las otras dos en los extremos.
Este ornamento litúrgico, exclusivo de los arzobispos residenciales o metropolitanos, se usa sobre la casulla, sostenido de los hombros.
