¡Cuidado!
Ya vienen
Y son terribles.
No tienen piedad.
Y se ensañan con los flojos.
Nos referimos a los exámenes finales.
Próximos a hacer su aparición en todos los planteles.
Este tema lo tratamos aquí con cierta frecuencia y no lo abandonaremos, buscando aportar experiencias personales que mucho ayudaron siempre.
¿Cómo evitar las angustias, los tormentos y los temores que ocasionan los exámenes escolares¿
Lo primero es casi no faltar a clases.
Lo importante también es tener amor por el estudio.
Y si es carrera profesional la que ya se cursa, tener la vocación de lo que se prepara para el futuro.
Ahora, quienes gustan de leer tendrán más facilidades que los que no tienen tan bella costumbre, porque conocemos de casos en que puro diez sacaban compañeros que gustaban de la lectura.
En cada plantel, los maestros conocen bien a sus alumnos, saben quiénes estudian y quiénes no. Sería interesante que los señores padres de familia de vez en cuando platicaran con los mentores de sus hijos, encontrarían siempre cosas interesantes, sólo que los padres pocas veces tienen tiempo de atender la educación de sus hijos.
Existen planteles donde los exámenes, desde el principio son muy exigentes. Por ejemplo, las facultades de medicina no aceptan recomendados sino gente con conocimientos y mucha vocación, pues quienes ahí pretenden estudiar van a tratar como profesionistas personas con problemas de salud.
En fin, esto lo escribimos pensando en quienes deben estudiar más, no en usted y sus hijos que son modelo de aprovechamiento y de atención.