Es moral. Con el arranque de las campañas políticas, los candidatos de los diferentes partidos se han comprometido a firmar sus promesas ante notario, pero ello no significa que así tengan que cumplirlas.
La firma de compromisos de los candidatos ante notario no implica nada más que un compromiso moral que no da herramientas a los ciudadanos en caso de que los aspirantes no cumplan con sus promesas.
El presidente del Colegio de Notarios, Ricardo Cisneros, dijo que esto es una medida de los políticos para incluir una figura acreditada por los ciudadanos, para dar mayor credibilidad a su campaña.
"Los candidatos lo que están haciendo es únicamente recurrir a un fedatario público, que goza de credibilidad en la sociedad, para respaldar, de esa manera, su compromiso social, pero a fin de cuentas, vaya ante un notario público o lo presente como un programa político, la única acción que puede haber en contra de dicha persona por incumplimiento es el señalamiento popular y la prueba será el documento que haya otorgado ante notario", explicó.
"El compromiso de cumplir con sus promesas de campaña tiene el mismo valor que si lo presenta en un programa político y lo distribuye entre sus votantes como si lo celebra ante notario público, es agregar un ingrediente de carácter moral a un compromiso de campaña", expuso.
Cisneros señaló que no hay forma de que los ciudadanos, en términos legales, puedan exigir a los candidatos que cumplan. Dijo que lo que queda plasmado para el daño político del candidato incumplido es la prueba fehaciente de que él se obligó a hacer tal o cual cosa.
"Al no aparecer el acto o al no estar construida la obra, ya habría una prueba del incumplimiento, esto se lo deben exigir los ciudadanos que votaron por él, pero desde el punto de vista político, no porque asuma una responsabilidad directa, inmediata, y con una obligación de reparar un daño ante el notario", indicó, "la sanción también deberá ser de carácter político".