Retirado. Hace un par de años dejó de trabajar la tierra al no poder costear la producción y obtener bajas ganancias con el producto.
Para algunos ejidatarios resulta incosteable seguir trabajando la tierra, debido a la alza de precios en los insumos y diversos factores como la importación de productos y la escasez del agua.
Antonio Navarro, trabajó toda la vida sus tierras en el ejido 18 de Marzo en el municipio de Bermejillo y ahora renta por 6 mil pesos al año.
Actualmente sigue recibiendo los programas de apoyo por ser propietario y en días recientes le entregaron mil 123 pesos del Procampo, mismos que también recibe una vez al año y con lo cual se sostiene además de la renta de su propiedad.
Este recurso fue otorgado por el Gobierno Federal a través de la Sagarpa en los meses de marzo y abril, debido a la contingencia por la sequía, fue adelantado ya que por lo general es entregado en agosto y septiembre.
En las tierras de don Antonio se siembran forrajes, principales cultivos que se producen en la Región Lagunera, entre los que destaca el maíz y el sorgo.
Comenta que hace un par de años que ya no pudo seguir solventando la actividad productiva y que la crisis comenzó desde hace tiempo cuando los costos empezaron a elevarse y el gobierno permitió realizar exportaciones de productos mexicanos, pagándolos a muy bajos costos a los productores.
Por otra parte, dijo que a raíz de que les fueron retirando los créditos a la gente del campo, fue que la situación se complicó más en su caso porque es complicado conseguir el capital para seguir trabajando la tierra. Además de las semillas todo va en incremento como el combustible, los fertilizantes y los herbicidas.
"Si el país produjera lo que consume, otra cosa sería, tenemos potencial para producir todos los productos de la canasta básica", finalizó.
